El juez de la Corte Suprema Samuel Alito rechazó el pedido de recusación para no intervenir en dos casos pendientes vinculados con el ex presidente Donald Trump y el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, pese a la polémica sobre las banderas alusivas a ese ataque que ondearon sobre algunas de sus casas.
La controversia surgió a raíz de un informe periodístico del diario The New York Times, en el que supuestamente, exhibió una bandera con la leyenda "Apelación al Cielo" en la casa de playa de Alito en Nueva Jersey el verano pasado.
Según el medio, se observó una bandera estadounidense invertida en la casa del juez en Alexandria, Virginia, menos de dos semanas después del ataque al Capitolio.
Los agitadores que irrumpieron en el edificio del Congreso aquel 6 de enero usaron esas mismas banderas.
La respuesta de Alito
A través de cartas a los senadores y la otra a los miembros de la Cámara de Representantes que pidieron su recusación, Alito dijo que los dos incidentes "no cumplen con las condiciones para la recusación", establecidas en el código de ética recientemente adoptado por la Corte Suprema.
Los críticos cuestionan la imparcialidad de Alito, sugiriendo un potencial conflicto de intereses en casos relacionados con Trump. A pesar del alboroto, el juez se mantiene firme en su decisión de no recusarse de los procesos judiciales en los que esté implicado el expresidente.
Pero el debate se centra en las responsabilidades éticas del juez Supremo y los posibles conflictos de intereses derivados de afiliaciones personales. Si bien, no existe una política de recusación obligatoria para la Corte, los jueces deben evitar situaciones que puedan socavar la confianza pública en su imparcialidad.
Alito se mantiene firme pese a las sospechas de imparcialidad
El juez Alito defiende su postura. Hizo hincapié en la importancia de la independencia judicial. Afirma que los jueces pueden separar sus creencias personales de sus responsabilidades profesionales. Sin embargo, su decisión de permanecer en los casos, argumenta, defiende la integridad del sistema judicial.
Al respecto, dijo que en ambos casos “una persona razonable que no esté motivada por consideraciones políticas o ideológicas o un deseo de afectar el resultado de los casos de la Corte Suprema” concluiría que no se requiere una recusación.
Los expertos jurídicos están divididos. Algunos sostienen que la presencia de esas banderas no debería descalificar automáticamente a un juez para conocer de casos relacionados con Trump.
Otros sostienen que, dada la fuerte asociación de las banderas con acciones extremistas, la implicación de Alito podría comprometer la confianza pública. En ese sentido, el magistrado dijo que no tuvo participación en la decisión de izar ninguna de las banderas y que su esposa, Martha-Ann Alito, quien las plantó.
Los dos casos que analiza la Corte Suprema
- El reclamo de inmunidad presidencial de Trump en su caso de interferencia electoral
- El otro, es una apelación presentada por un hombre procesado por su papel ese mismo día