Al comenzar el verano, la temporada de la Women's National Basketball Association (WNBA) experimentó varios récords en cuanto popularidad, cautivando al público como nunca antes. La liga anunció el lunes que el primer mes fue testigo de unos índices de audiencia televisiva y de asistencia sin precedentes, una hazaña que no se veía desde sus inicios.
La afluencia de espectadores se debe en parte a la llegada de las novatas estrella: Caitlin Clark, de Indiana, Angel Reese, de Chicago, y Cameron Brink, de Los Ángeles. Estas deportistas ya contaban con un importante número de seguidores desde sus carreras universitarias, y su entrada en el ámbito profesional amplificó la audiencia de la liga.
¿Cuántos televidentes alcanzó la WNBA este inicio de temporada?
En las principales cadenas como ABC, ESPN, ESPN2, CBS, ION y NBA TV, los partidos de la WNBA tuvieron una media de 1,32 millones de espectadores. Esta cifra casi triplica los 462.000 espectadores de la temporada pasada. Los entusiastas están sintonizando, ansiosos por ver talentos de alto calibre y enfrentamientos emocionantes.
Colie Edison, directora general de crecimiento de la WNBA, reflexionó sobre este repunte: "Lo que está sucediendo ahora en el baloncesto femenino es la confirmación de lo que siempre hemos sabido: la demanda está ahí y los deportes femeninos son una inversión valiosa".
Además, la WNBA registró un aumento sustancial de espectadores pertenecientes a minorías, con un incremento del 96% entre los espectadores hispanos y del 67% entre los espectadores afroamericanos. Estas cifras representan el creciente impacto cultural de la liga y su capacidad para atraer a un público más amplio.
Aumento de asistencia a los estadios de la WNBA
Las cifras de asistencia también reflejan este aumento del interés. Más de 400.000 aficionados asistieron a los partidos en el primer mes, un récord sin igual en 26 años. Los estadios funcionaron al 94% de su capacidad, un aumento significativo del 17% respecto al año anterior.
Cabe destacar que algunos partidos se trasladaron a recintos más grandes para acomodar a la creciente afición, como el partido de las Indiana Fever en el estadio de los Washington Wizards, que atrajo a 20.333 espectadores.
Las ventas de merchandising también se dispararon, con un aumento del 236% respecto al mismo periodo del año anterior. Las camisetas de novatos como Clark, Reese y Brink se situaron entre las cinco más vendidas, lo que pone de relieve su importante atractivo en el mercado.
La WNBA sigue batiendo récords y ampliando su alcance, por lo que sirve de testimonio del potencial del deporte femenino. La capacidad de la liga para atraer a grandes multitudes y audiencias televisivas significativas apunta hacia un futuro prometedor y la solidificación de una base de aficionados más inclusiva.
