Este martes durante una rueda de prensa, el presidente francés, Emmanuel Macron, disipó los rumores su renuncia, afirmando que no dimitirá "sea cual sea el resultado" de las próximas elecciones legislativas.
Los comentarios de Macron respondieron directamente a las especulaciones alimentadas por los rumores que circulan desde el martes, sugiriendo su posible dimisión.
El Elíseo desmintió rápidamente estos rumores. El presidente también hizo hincapié en su participación activa en la campaña electoral, advirtiendo contra la suposición de que el éxito de la Agrupación Nacional (RN) en las elecciones europeas predice resultados similares en las elecciones parlamentarias debido a los diferentes sistemas electorales.
"No es la Agrupación Nacional la que escribe la Constitución ni su espíritu", dijo en una entrevista con la revista Le Figaro. "Las instituciones están claras y también lo está el lugar del presidente, sea cual sea el resultado".
Los votantes franceses emitirán su voto en la primera vuelta de las elecciones parlamentarias el 30 de junio, con una segunda vuelta el 7 de julio.
Macron subrayó: "La política es dinámica. Nunca he creído en las encuestas. La decisión que he tomado abre una nueva era. Comienza una nueva campaña y deberíamos mirar los resultados de cada circunscripción a la luz de los de las elecciones europeas".
Para lanzar su campaña, Macron tiene previsto dar una conferencia de prensa en un hotel parisino el miércoles. Este acto, previsto inicialmente para el martes, significa el inicio de lo que anticipa será un impulso electoral decisivo.
Desafíos políticos
A pesar de las garantías de Macron, existe malestar en el seno de su coalición política. Varios diputados de su campo creen que su implicación directa puede ser más perjudicial que beneficiosa, según el Playbook París de POLITICO.
Más allá del descontento interno, la administración de Macron se enfrenta a preocupaciones más amplias. El panorama político francés, enrarecido por el ascenso de la extrema derecha y la convocatoria de elecciones anticipadas, inquieto a los mercados financieros.
Las agencias de crédito y los analistas económicos advierten de que la inestabilidad política y una posible victoria de la Agrupación Nacional podrían obstaculizar los esfuerzos de Francia por gestionar su importante deuda pública.
Este escenario subraya lo que está en juego en este periodo electoral para la presidencia de Macron. Su postura decidida refleja una estrategia para afrontar los retos de frente y galvanizar el apoyo en toda Francia.
A medida que se acerquen las fechas de las elecciones, se observará la dinámica de la vida política francesa, centrándose en cómo responde el electorado tanto a la campaña de Macron como a los avances de la oposición.