El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, declaró que sin el mantenimiento de la integridad territorial de Ucrania, la "paz duradera" sigue siendo inalcanzable.
Las declaraciones de Zelensky, pusieron fin a una cumbre de paz de dos días celebrada en Lucerna, Suiza el domingo, a la que asistieron delegados de más de 100 países.
Mas de 80 países apoyaron a Ucrania
El sereno telón de fondo del lago de Lucerna contrastó fuertemente con los intensos debates de la cumbre. La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, destacó que la elevada asistencia subrayaba la preocupación mundial por el conflicto ucraniano.
La principal conclusión de la cumbre fue una declaración firmada por 80 países en la que reafirmaban su compromiso con la integridad territorial de todas las naciones, incluida Ucrania. Cabe destacar que India, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos se abstuvieron de firmar el comunicado final.
Una renovada atención a la resolución pacífica surgió después de que el presidente ruso Vladimir Putin revelara una propuesta para el "fin definitivo" del conflicto.
Las condiciones de Putin exigían la retirada de Ucrania de Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporizhzhia, el abandono de las ambiciones de la OTAN y el levantamiento de las sanciones occidentales contra Rusia.
Zelensky, dirigiéndose a los periodistas junto a dirigentes de la Unión Europea, Ghana, Canadá, Chile y Suiza, destacó la importancia de apoyar la integridad territorial de Ucrania. "No habrá paz duradera sin integridad territorial", declaró..
El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, calificó las condiciones de Putin de fundamentalmente inmorales, argumentando que dejarían a Ucrania vulnerable a futuras agresiones. "Ninguna nación responsable podría considerar esto una base razonable para la paz", remarcó Sullivan.
Putin no tiene intenciones de poner fin a la Guerra con Ucrania
La presidenta de la Comisión Europea, Von der Leyen, se hizo eco de este sentimiento. Calificó las condiciones de Putin de indignantes e insistió en que ningún país las aceptaría.
"Las condiciones de Putin son esencialmente de capitulación más que de paz genuina", declaró, señalando que la cumbre no era una negociación de paz porque Putin no tiene seriamente la intención de poner fin a la guerra.
Von der Leyen destacó además el éxito de la cumbre para avanzar hacia una "paz real". Reiteró que, en última instancia, es prerrogativa de Ucrania establecer los términos para alcanzar la paz.
"Insto a Rusia a que preste atención al mensaje de la comunidad internacional. Respete la integridad territorial y la soberanía de Ucrania. Cuando Rusia demuestre su disposición a una paz basada en la Carta de la ONU, sólo entonces estará claro el camino a seguir", concluyó.
Cuando los líderes mundiales abandonaron Lucerna, el consenso era claro: la verdadera paz en Ucrania depende de su soberanía territorial. No se aceptarán demandas unilaterales de rendición y desarme.