El juicio a puertas cerradas del periodista estadounidense Evan Gershkovich comenzó el miércoles en la ciudad rusa de Ekaterimburgo, 15 meses después de que fuera arrestado y acusado de espionaje mientras realizaba un viaje periodístico.
El caso marca la primera vez desde la Guerra Fría que un periodista estadounidense es juzgado por espionaje en Rusia.
Los fiscales rusos anunciaron a principios de este mes que habían finalizado la investigación y determinaron que Gershkovich había “recopilado información secreta” sobre la fábrica militar Uralvagonzavod en la región de Sverdlovsk en Rusia mientras “cumplía una misión de la CIA”.
Aunque el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró que Gershkovich fue sorprendido "con las manos en la masa", nunca se ha hecho pública ninguna prueba.
Gershkovich, la Casa Blanca y su empleador, el Wall Street Journal, han considerado que las acusaciones son infundadas. Si es declarado culpable, enfrenta hasta 20 años de prisión.
El arresto Evan Gershkovich: una carta bajo la manga de Putin
Gershkovich, de 32 años, es un ciudadano estadounidense que trabajaba como periodista acreditado en Rusia durante seis años. Se encuentra en prisión preventiva en la prisión de Lefortovo, en Moscú, desde su arresto en marzo de 2023.
Su caso fue transferido este mes a un tribunal en Ekaterimburgo, donde inicialmente arrestaron a Gershkovich, y lo trasladaron a un centro de detención en la ciudad. Como es habitual en los casos de espionaje en Rusia, el juicio permanecerá cerrado al público y se espera que dure varios meses.
El año pasado, el Departamento de Estado declaró que Gershkovich y el exmarine estadounidense Paul Whelan, quien fue arrestado en 2018 por cargos similares, estaban detenidos injustamente, una designación que compromete al gobierno federal a trabajar para su liberación.
El Kremlin ha señalado que está abierto a la posibilidad de intercambiar a Gershkovich por ciudadanos rusos de alto valor encarcelados en el extranjero una vez que se emita un veredicto.
El presidente Vladimir Putin le dijo al presentador de un programa de entrevistas de derecha estadounidense Tucker Carlson en febrero durante su primera entrevista con una figura de los medios occidentales desde la invasión de Ucrania en 2022 que “se puede llegar a un acuerdo” con Estados Unidos para liberar a Gershkovich.
Durante la entrevista, Putin indicó que quería conseguir la liberación de Vadim Krasikov, un presunto agente de inteligencia ruso condenado por el asesinato de un disidente checheno en Berlín en 2019.