La selección de Chile fue testigo de una generación de futbolistas que dejaron una marca imborrable en su historia. Sin embargo, en la actual Copa América, dos de sus estrellas más brillantes no están presentes.
Lejos de los años de gloria, la selección chilena, dirigida por el técnico argentino Ricardo Gareca, llegó a Estados Unidos sin dos de sus figuras históricas: Arturo Vidal y Gary Medel.
Algunos miembros clave de esta generación, como Alexis Sánchez y Claudio Bravo, siguen presentes, llevando consigo la esperanza de un resurgimiento.
Estrellas de la generación dorada fuera de la Copa América
Arturo Vidal, tras una extensa carrera en Europa, regresó a Chile para jugar con Colo Colo pero no fue considerado por Gareca. Por su parte, Gary Medel, ahora en Boca Juniors, tampoco fue llamado para formar parte de la renovada defensa chilena.
La ausencia de estas estrellas de la generación dorada, que ganó el bicampeonato de América en 2015 y 2016, marca un punto de inflexión en el camino de La Roja.
Ricardo Gareca, desde su llegada a Chile, dejó claras sus ambiciones: "Me trajeron para clasificar al Mundial", declaró en marzo al anunciar su primera lista de convocados para un amistoso.
Tras los fracasos en las clasificatorias de los mundiales de Rusia 2018 y Qatar 2022, la presión está en elevar el nivel futbolístico para asegurar un lugar en el Mundial de 2026.
Gareca, familiarizado con esta generación dorada a la que enfrentó con Perú, decidió convocar a veteranos como Claudio Bravo, Mauricio Isla y Alexis Sánchez. Eduardo Vargas, anteriormente excluido, también fue reintegrado al equipo.
Además, Gareca apostó por jóvenes talentos como Darío Osorio, de 20 años, que juega en el Midtjylland de Dinamarca.
La historia de la generación dorada
La transformación de la selección chilena comenzó en 2007 con la llegada de Marcelo Bielsa, cuyo estilo táctico revolucionó el fútbol chileno.
Jugadores como Vidal, Sánchez, Bravo y Medel emergieron como titulares en la ruta hacia el Mundial de Sudáfrica 2010. Aunque fueron eliminados por Brasil en octavos, la base del equipo estaba establecida.
Tras Bielsa, Claudio Borghi tomó las riendas brevemente, seguido por Jorge Sampaoli en 2012.
Sampaoli, con su triunfal paso por Universidad de Chile, llevó a La Roja a su segundo Mundial consecutivo en 2014, eliminando a España en la fase de grupos antes de caer nuevamente ante Brasil en octavos.
El verdadero apogeo llegó en 2015 con la conquista de la Copa América en Chile, un triunfo histórico ante Argentina.
En 2016, bajo Juan Antonio Pizzi, Chile logró el bicampeonato al vencer nuevamente a Argentina en la Copa América Centenario.
El Declive: Post-Bicampeonato y la era Pizzi
El éxito terminó en 2017 con la derrota en la final de la Copa Confederaciones ante Alemania.
Las eliminaciones del Mundial de Rusia 2018 y los pobres desempeños en la Copa América de 2019 y 2021 marcaron el declive de la generación dorada, a pesar de los esfuerzos de técnicos como Reinaldo Rueda por renovar el equipo.
Jorge Sampaoli sobre la generación dorada de Chile
En una entrevista con El País, Jorge Sampaoli recordó su tiempo al mando de la generación dorada chilena, calificándola de invencible en Sudamérica.
"Los argentinos sintieron curiosidad cuando ganamos la Copa América en 2015 y antes con la Copa Sudamericana con la Universidad de Chile en 2011. Eso despertó cierta intranquilidad", señaló.
Sampaoli subrayó que el éxito del equipo se basaba en la calidad de la generación de jugadores, destacando su forma de juego como clave para sus triunfos.
"Las generaciones de jugadores marcan la fortuna de los seleccionadores. En Chile nos tocó una generación que en muchos momentos nos hizo invencibles", concluyó Sampaoli.
