El presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó este jueves que las naciones occidentales están empleando métodos represivos y de intimidación en un esfuerzo por mantener su dominio global.
El líder ruso hizo estas declaraciones durante su intervención en el X Foro Parlamentario de los países BRICS, que se celebra en la ciudad de San Petersburgo.
La lógica histórica ignorada por Occidente
Putin expresó que, "actuando en contra de la lógica histórica y a menudo incluso en detrimento de los intereses a largo plazo de sus propios pueblos, pretenden ahora fijar un cierto orden sobre sus supuestas reglas, que nadie vio, nadie ha discutido y nadie ha aceptado jamás".
Estas normas, según él, son modificadas según convenga a aquellos que se creen excepcionales y tienen el derecho de imponer su voluntad sobre los demás, algo que calificó como una tradición del colonialismo clásico.
Presión sobre quienes tienen posturas independientes
El presidente ruso señaló que este intento de establecer un orden mundial unilateral es un esfuerzo por sustituir el derecho internacional legítimo con un monopolio de la verdad, lo cual es "destructivo".
"Crece la presión sobre todos los que tienen una postura propia. En contra de los principios del derecho internacional, se está recurriendo a la coacción por la fuerza, las sanciones unilaterales, la aplicación selectiva de las normas comerciales y el chantaje".
Putin sobre BRICS y el nuevo orden mundial multipolar
Refiriéndose al trabajo del grupo BRICS, Putin destacó que esta asociación es "uno de los elementos clave del emergente orden mundial multipolar".
Indicó que uno de los objetivos principales del grupo es lograr cambios positivos en la economía mundial, y que los principios de apertura, imparcialidad y equidad son los que unen a los países miembros.
El X Foro Parlamentario de los BRICS, que se extiende del 11 al 12 de julio, discutirá el papel de los parlamentos en mejorar la eficacia del sistema de relaciones internacionales y garantizar su democratización.
También abordará la lucha contra la fragmentación del sistema comercial multilateral y las consecuencias de las crisis globales, así como la cooperación interparlamentaria en el ámbito humanitario y cultural.