El piloto mexicano Pato O'Ward protagonizó un impactante accidente múltiple en la carrera callejera de Toronto, lo que desató un debate sobre la seguridad en las competiciones de IndyCar. El incidente dejó a 6 autos fuera de competencia y a los fanáticos conmocionados.
Un trompo inesperado desencadena el caos
Todo comenzó en la vuelta 72 de la carrera, cuando O'Ward perdió el control de su auto en la curva 1, golpeando el muro y quedando en medio de la pista. La maniobra repentina tomó por sorpresa a los pilotos que venían detrás, lo que provocó una serie de choques violentos.
"Lo siento por mi equipo y por todos los implicados sin culpa alguna. En cuanto al incidente... ¿Quizás la próxima vez, al menos poner una amarilla local cuando un auto esté en el punto más peligroso posible @IndyCar? Sólo una idea", publicó el piloto mexicano en sus redes sociales, visiblemente frustrado.
Las cámaras a bordo del auto de O'Ward captaron la gravedad del accidente. Las imágenes muestran 4 impactos estremecedores y la fuerza con la que los autos golpearon el muro y entre sí. A pesar de la violencia del choque, Pato O'Ward y el piloto Santino Ferrucci, quien también se vio involucrado, salieron ilesos gracias al aeroscreen, un elemento de seguridad crucial que protege la cabeza de los pilotos.
Pato O'Ward pide mejoras en seguridad tras choque en IndyCar
O'Ward no fue el único en criticar la respuesta de la IndyCar al incidente. El director del equipo Arrow McLaren, Gavin Ward, también expresó su descontento, afirmando al portal web Motorsports que "la categoría tiene que ver cómo puede mejorar esto".
"Me alivia que Santino esté bien; podría haber sido mucho peor. Puedo confirmar que tenemos al menos un coche totalizado. Otro podría ser reparable, pero uno está acabado para el año. También tenemos un piloto magullado y otro recuperándose de una fractura en el pulgar [Alexander Rossi], lo que hace que este sea un fin de semana duro en general".
Un representante de la IndyCar defendió la actuación de los comisarios, señalando que la bandera amarilla local se mostró cuando Ericsson golpeó el muro. Sin embargo, O'Ward y Ward sostienen que las banderas no se mostraron con la suficiente antelación, lo que pudo haber evitado el accidente.
La adrenalina y la emoción de este deporte vienen acompañadas de riesgos considerables, y este accidente sirve como un recordatorio de la importancia de mejorar las medidas de seguridad para proteger a los pilotos.
El diálogo generado por este incidente podría impulsar cambios en los protocolos de la IndyCar, buscando minimizar el riesgo de accidentes tan graves y proteger a los valientes competidores que desafían los límites de la velocidad y la habilidad.
