Una investigación de la Oficina de Servicios de Supervisión Interna de la ONU revela que nueve miembros del personal del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (OOPS) podrían tener vínculos con el ataque del 7 de octubre contra Israel.
Llevado a cabo por Hamás, este ataque causó 1.200 muertos y unos 240 rehenes, según informaron funcionarios israelíes. En respuesta, las acciones israelíes han provocado más de 40.000 muertos en Gaza, según informes locales.
Israel alegó en enero que al menos 12 miembros del personal de la UNRWA participaron en el ataque. Estas afirmaciones llevaron a varios países, entre ellos Estados Unidos, a suspender la financiación de la agencia.
El Comisario General de la UNRWA declaró sobre la investigación de la ONU
El lunes, el Comisario General de la UNRWA, Philippe Lazzarini, declaró que las acusaciones habían sido puestas en conocimiento de la agencia, lo que había llevado a la rescisión de los contratos de los miembros del personal implicados.
La investigación se centró en 19 miembros del personal en Gaza. Lazzarini señaló que el Secretario General de la ONU, António Guterres, solicitó esta revisión. Un miembro del personal, del que se descubrió que no estaba implicado, fue readmitido. En otros nueve casos, las pruebas fueron insuficientes para confirmar la implicación.
Sin embargo, para los nueve miembros del personal restantes, Lazzarini indicó que si se verificaban, las pruebas recogidas podrían sugerir su participación en los ataques del 7 de octubre. En consecuencia, la UNRWA ha decidido rescindir sus contratos.
La importancia de la UNRWA en Gaza, Jordania, Líbano y Siria
Creada en 1949, la UNRWA proporciona asistencia y protección a los refugiados palestinos en Cisjordania, Gaza, Jordania, Líbano y Siria. Recientemente, la agencia ha desempeñado un papel crucial en el suministro de ayuda humanitaria a Gaza en medio de los intensos bombardeos israelíes.
En la actualidad, la UNRWA emplea a unos 30.000 trabajadores en toda la región, incluidos 13.000 en Gaza. La agencia se esfuerza por cumplir su mandato humanitario a pesar de la inestabilidad regional y la escalada de los conflictos.