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¿Donar un riñón es peligroso? Un nuevo estudio explica por qué es más seguro que nunca

Descubre la seguridad de donar un riñón: el riesgo de muerte para los donantes se redujo en más de la mitad en la última década

donar riñón
Cirugía de trasplante de riñón. Foto: Anna Shvets/Pexels

Una investigación reciente confirma que donar un riñón se volvió notablemente más seguro. El estudio revela que el riesgo de muerte para los donantes de riñón se ha reducido en más de la mitad en la última década.

"Donar es cada vez más seguro", declaró el Dr. Dorry Segev, cirujano de trasplantes de NYU Langone Health y autor principal del estudio.

Donar un riñón ahora es mucho mas seguro

Tradicionalmente, el riesgo de muerte para los donantes de riñón ya era bajo. Sin embargo, los avances en las técnicas quirúrgicas, la atención médica y la mejora de la selección de donantes han mitigado aún más estos riesgos.

Los riñones desempeñan un papel crucial filtrando toxinas y regulando la presión sanguínea. Con el aumento de la prevalencia de afecciones como la diabetes y la hipertensión, que provocan enfermedades renales, la demanda de donaciones de riñón se ha intensificado.

En la actualidad, cerca de 90.000 personas en EEUU esperan un trasplante de riñón, soportando a menudo una espera de tres a cinco años. Anualmente se realizan unos 27.000 trasplantes de riñón, lo que convierte a los riñones en el órgano más trasplantado.

El estudio, publicado en JAMA, analizó los datos de las muertes ocurridas en los 90 días siguientes a la donación de riñón entre 1993 y 2022.

Los datos procedían del Registro Científico de Receptores de Trasplantes y de la Red de Adquisición y Trasplante de Órganos. En el estudio participaron 164.593 donantes de riñón, con 36 fallecimientos en los 90 días posteriores a la intervención.

Tasa de mortalidad en el postoperatorio

Entre 1993 y 2002, la tasa de mortalidad postoperatoria se situó en 3 por cada 10.000 donantes, con un total de 13 fallecimientos.

De 2003 a 2012, se registraron 18 fallecimientos, lo que redujo la tasa de mortalidad a 2.9 por cada 10.000 donantes. Sorprendentemente, de 2013 a 2022, las muertes se redujeron a cinco, lo que equivale a una tasa de mortalidad de 0.9 por cada 10.000 donantes.

El Dr. Segev destacó el auge de la cirugía laparoscópica durante este periodo. Este método mínimamente invasivo emplea pequeñas incisiones e instrumentos especializados, en contraste con la nefrectomía de donante abierta tradicional, que implicaba incisiones más grandes, tiempos de recuperación más largos y mayores riesgos de complicaciones.

Anteriormente, los donantes varones y los que tenían antecedentes de hipertensión arterial presentaban un mayor riesgo de muerte en los 90 días posteriores a la intervención. La mayoría de los fallecimientos se produjeron en la primera semana postoperatoria, principalmente debido a una hemorragia excesiva.

"Es crucial que comuniquemos sistemáticamente la verdad sobre los riesgos", subrayó el Dr. Kassem Safa, director médico asociado del programa de trasplantes de riñón del Hospital General de Massachusetts. "Este estudio valida que se trata de una cirugía muy segura con un riesgo mínimo, aunque no nulo".

Se esperan mas donante de riñones en EEUU

La mayoría de los donantes de riñón gozan de buena salud y no tienen problemas médicos subyacentes. "Les decimos a los donantes que no tienen por qué hacerlo y que no hay beneficios médicos para ellos", añadió Safa.

Afortunadamente, los datos a largo plazo indican una función renal estable para los donantes, con sólo un ligero aumento del riesgo de enfermedad renal crónica en comparación con los no donantes.

Los expertos esperan que estos datos tranquilizadores solucionen la escasez de donantes en EEUU "Si ser donante vivo es cada vez más seguro, más gente podría acercarse a donar y dar el regalo de la vida", sugirió el Dr. John Friedewald, director médico del programa de trasplantes de riñón de Northwestern Medicine.

Tracy McKibben, miembro de la junta directiva de la Fundación Nacional del Riñón, donó un riñón a su madre en 2009. Su madre, antaño activa, se había visto limitada por las sesiones de diálisis.

"Supuso un mundo de diferencia para ella y para mí", recuerda McKibben. "Verla recuperar su antigua vida fue increíble".

Estos hallazgos facultan a los médicos para ofrecer un consentimiento mejor informado a los posibles donantes, asegurándose de que comprenden los riesgos muy bajos y los profundos beneficios de la donación de riñón.

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