El expresidente Donald Trump alega cada vez que puede que en las elecciones presidenciales pasadas hubo un fraude electoral, sin embargo, estas afirmaciones falsasr podrían llevar al país a un cierre de gobierno y poner en riesgo a la mayoría de los republicanos en la Cámara de Representantes.
Una muestra de ello es que Mike Johnson, presidente republicano de la Cámara de Representantes, presentó nuevamente la incapacidad para gobernar al no lograr aprobar este miércoles una extensión de seis meses para la financiación del Gobierno.
Su propuesta, a través de un proyecto de ley, incluía una disposición destinada a satisfacer a Trump, la cual complicaría el acceso al voto para los ciudadanos estadounidenses.
Las demandas del candidato republicano para incluir en el proyecto un enfoque en el voto de los no ciudadanos, que ya es ilegal, dejaron a Johnson en una situación complicada sin soluciones evidentes. Esto incrementa el riesgo de una crisis en Washington justo antes de las elecciones, lo que podría resultar perjudicial para el Partido Republicano.
La estrategia actual carece de posibilidades de resultar en una nueva legislación, dado que los demócratas que tienen el control del Senado se oponen firmemente a ella.
Los republicanos en la Cámara de Representantes
Además, Johnson no logró reunir el apoyo ni de 16 de sus propios miembros debido a la falta de consenso entre algunos conservadores que demandan recortes presupuestarios drásticos, los cuales también enfrentan obstáculos significativos para ser aprobados, considerando la actual división de poderes en Washington.
Parece que Johnson no tiene más remedio que buscar un acuerdo con los demócratas del Senado para una solución temporal de financiamiento.
Sin embargo, la delgada mayoría del Partido Republicano en la Cámara de Representantes y la reaparición de Trump complican aún más su situación, ya que cada decisión que tome el presidente de la Cámara podría ser riesgosa, especialmente si su intención es retener su cargo en caso de que los republicanos logren mantener el control en noviembre.
Trump está dando señales de que el Partido Republicano se está preparando para una intensa lucha interna, lo que podría convertirse en un gran problema en las elecciones de noviembre.