Durante décadas, Vince McMahon fue el arquitecto de la lucha libre profesional moderna, transformando la World Wrestling Entertainment (WWE) en un imperio global. Su imagen pública era la de un magnate despiadado pero visionario, capaz de crear superestrellas y eventos multimillonarios. Sin embargo, un nuevo documental de Netflix revela que, detrás de la fachada de poder y éxito se escondía un lado oscuro, lleno de acusaciones de abuso sexual, acoso laboral y prácticas cuestionables.
Ascenso y caída de un imperio
Los orígenes de un dinastía
McMahon heredó el negocio de la lucha libre de su padre. Fue en 1982 que le compró la entonces World Wrestling Federation (WWF), y rápidamente lo convirtió en una potencia mundial. Bajo su liderazgo, figuras icónicas como Hulk Hogan y André el Gigante vieron la época dorada de la lucha en los años 80. Gracias a la creación de WrestleMania en 1985, la WWE se consolidó como la principal organización de lucha libre en el mundo.
El uso de esteroides y las primeras controversias
A lo largo de los años 80 y 90, la WWE se vio envuelta en una serie de escándalos relacionados con el uso de esteroides anabolizantes. McMahon fue investigado por el FBI, pero logró salir absuelto. Sin embargo, Bret Hart, una figura destacada de la lucha libre, declaró en el documental que "el 90% de los luchadores usaban esteroides".
La tragedia de Chris Benoit y las consecuencias
Nuevos problemas surgieron para McMahon en 2007 con la trágica muerte del exluchador Chris Benoit, quien asesinó a su esposa y su hijo. La investigación reveló que Benoit sufría de encefalopatía traumática crónica grave (CTE), relacionada con los múltiples golpes a la cabeza sufridos durante su carrera como luchador.
El diario El Español destacó que este trágico evento obligó a la WWE a implementar nuevas medidas de seguridad para proteger a sus luchadores. McMahon, sin embargo, negó cualquier conexión entre las lesiones de Benoit y las prácticas de la WWE.
Acusaciones y escándalo envuelven a Vince McMahon
Un patrón de abuso
En los últimos años, múltiples mujeres han acusado a McMahon de conducta sexual inapropiada y acoso. La demanda presentada por Janel Grant, una antigua empleada de la WWE, detalla un patrón de abuso que involucraba coerción, intimidación y pagos millonarios para silenciar a las víctimas.
El impacto en la reputación de McMahon
Las revelaciones sobre la conducta de McMahon han tenido un impacto devastador en su reputación y en la imagen de la WWE. Incluso trató de detener la producción de la docuserie de Netflix, alegando manipulación de los hechos. Su desvinculación definitiva de la WWE en abril, tras vender sus acciones de TKO Group Holding, marcó el fin de una era de más de 50 años en la lucha libre profesional.
El legado manchado de WWE
La serie documental de Netflix "Mr. McMahon" ofrece una mirada sin precedentes a la vida y carrera del controvertido magnate. A través de entrevistas con exempleados, luchadores y periodistas, el documental pinta un retrato complejo y a menudo desfavorable de McMahon.
Testimonios de leyendas de la lucha libre como Dwayne "The Rock" Johnson, Hulk Hogan y Bret Hart, quienes comparten sus experiencias y perspectivas sobre el hombre que revolucionó la industria.
Las entrevistas se grabaron hace 2 años, antes de su renuncia como director ejecutivo en 2022. Esta decisión vino tras revelaciones de que McMahon había pagado $12 millones en acuerdos de confidencialidad a 4 mujeres por denuncias de conducta sexual inapropiada. Tras estas revelaciones, McMahon canceló más entrevistas programadas.
A lo largo de la docuserie, McMahon habla en un tono más bajo que el de su personaje en el ring, conocido por su imponente presencia. Comparte breves reflexiones sobre su infancia, sugiriendo una educación abusiva.
McMahon rechazó las acusaciones en su contra y criticó el documental de Netflix, alegando que se trata de una representación sesgada y manipulada de los hechos, según NBC News. Sin embargo, las pruebas presentadas en el documental y en las demandas legales son difíciles de ignorar.
La caída de Vince McMahon marca el fin de una era en la lucha libre profesional. Su legado está manchado por las acusaciones de abuso y explotación. A pesar de sus logros en el mundo del entretenimiento, McMahon será recordado como un hombre que abusó de su poder y dañó a muchas personas.