La FIFA se enfrenta a una de las mayores denuncias de su historia. Las principales ligas europeas, encabezadas por LaLiga y la Premier League, han presentado una demanda formal ante la Comisión Europea acusando al organismo rector del fútbol mundial de "abuso de poder".
El conflicto se centra en el nuevo calendario futbolístico internacional, que según los demandantes, pone en riesgo la salud de los jugadores y la sostenibilidad de las ligas nacionales.
Ligas europeas denuncian a la FIFA por abuso de poder
El lunes, los sindicatos de jugadores y las principales ligas europeas se agruparon para acusar a la FIFA de "abuso de poder". Este término resuena con fuerza, ya que la denuncia se basa en la falta de consideración hacia la salud de los jugadores y la sostenibilidad de las ligas nacionales en el nuevo calendario propuesto. David Terrier, presidente de FIFPro Europa, delineó la postura de las organizaciones denunciantes:
"Presentamos un caso claro a la Comisión Europea. La FIFA aprovecha su posición dominante para establecer un calendario de partidos internacionales sobrecargado que aumenta sus competiciones y sus ingresos".
“Our case to the European Commission is clear; FIFA is abusing its power to dictate the international match calendar and expand its own competitions – and thereby increase its own revenues.”#FIFPRO Europe president, David Terrier’s opening remarks at today’s press conference. pic.twitter.com/nc2gAd98Uo
— FIFPRO (@FIFPRO) October 14, 2024
Calendario sobrecargado agobia a los futbolistas
El corazón del conflicto radica en el apretado calendario futbolístico, agravado por el nuevo formato de la Copa Mundial de Clubes 2025. Los críticos argumentan que este calendario excesivamente cargado deja a los jugadores con poco tiempo de recuperación, lo que puede llevar a lesiones y un rendimiento disminuido. Javier Tebas, presidente de LaLiga, también se hizo eco de la gravedad de la situación:
"Dialogamos, pero ellos proceden como quieren. El diálogo solo es útil cuando conduce a un acuerdo. Este es uno de los días más significativos del fútbol, con repercusiones impactantes en los próximos meses".
¿Las ligas también tienen la culpa?
Por su parte, la FIFA defendió su decisión de ampliar el calendario en julio, argumentando que es necesaria para promover el crecimiento del fútbol a nivel mundial. La organización también señaló que muchas ligas europeas programan numerosos partidos amistosos y giras de pretemporada, lo que contribuye a la carga de trabajo de los jugadores.
"Estas ligas parecen favorecer un calendario repleto de amistosos, que exigen importantes desplazamientos internacionales",
dijo la FIFA en el comunicado.
The current calendar was unanimously approved by the FIFA Council, which is composed of representatives from all continents, including Europe, following a comprehensive and inclusive consultation, which included FIFPRO and league bodies.
— FIFA Media (@fifamedia) July 23, 2024
FIFA’s calendar is the only instrument… pic.twitter.com/kpmUItrimN
Ejemplos recientes ilustran esta crítica, reseñó BBC News. Tras el cierre de la Premier League la temporada pasada en mayo, equipos como el Newcastle United y el Tottenham disputaron partidos de exhibición en Melbourne, y otros clubes organizaron partidos de pretemporada en Estados Unidos y Tokio. La FIFA subraya que esta situación agrava la carga de trabajo de los jugadores, anteponiendo los intereses comerciales a la salud de los futbolistas.
Calidad, no cantidad: el debate
Un estudio reciente del Observatorio del Fútbol CIES sugiere que la narrativa de un calendario sobrecargado puede ser exagerada. Los datos muestran que, en promedio, los clubes juegan menos de 40 partidos por temporada y solo un 5% supera los 60 encuentros. Sin embargo, los críticos argumentan que la calidad de los partidos, y no solo la cantidad, es lo que realmente importa.
Con la presentación de esta denuncia, el futuro del fútbol se torna incierto. El enfrentamiento entre la FIFA y las entidades futbolísticas europeas no solo plantea cuestiones legales, sino que también toca fibras sensibles respecto al bienestar de los jugadores y la salud del deporte en general. Las repercusiones de este conflicto marcarán una nueva etapa en la gobernanza del fútbol mundial, y todos los ojos estarán puestos en las decisiones que emerjan de esta batalla legal.