Después de 2 años llenos de altibajos, Erik ten Hag dejó de ser el entrenador del Manchester United, anunció el club el lunes. A pesar de conquistar la Copa Carabao y la Copa de Inglaterra, los malos resultados en la Premier League y la presión de la afición pesaron más. Una derrota ante el West Ham United fue la gota que colmó el vaso, relegando al United al puesto 14 y sellando el destino de Ten Hag en Old Trafford.
Un comienzo turbulento con Ronaldo
Desde su llegada, Ten Hag se enfrentó a desafíos importantes. Uno de los más sonados fue su enfrentamiento con Cristiano Ronaldo. La decisión de sustituir al astro portugués en un partido de pretemporada contra el Rayo Vallecano desencadenó una crisis que culminó con la salida del astro portugués.
La sombra de Ferguson y la presión de los resultados
Ten Hag llegó a un club con una gran historia y una afición exigente. La presión por igualar los éxitos de Sir Alex Ferguson fue constante. A pesar de una inversión de €214,5 millones en nuevos jugadores, el equipo no logró alcanzar las expectativas.
Lesiones, fichajes fallidos y falta de identidad
Las lesiones de jugadores clave como Tyrell Malacia y Luke Shaw perjudicaron gravemente el rendimiento del equipo. Además, fichajes como André Onana no cumplieron con las expectativas. Ten Hag tuvo dificultades para establecer una identidad de juego clara en el United.
Erik ten Hag, un líder carismático con sus limitaciones
Fuera del campo, Ten Hag era una persona agradable y accesible. Sin embargo, dentro del terreno de juego, sus decisiones tácticas y su comunicación con los medios a veces fueron cuestionadas.
El futuro del Manchester United
Con la salida de Ten Hag, el Manchester United se encuentra en un momento de transición. Ruud van Nistelrooy ha asumido el cargo de entrenador interino mientras el club busca un nuevo técnico que pueda devolver al equipo a la cima del fútbol inglés.
Exjugadores como Gary Neville y Rio Ferdinand compartieron sus opiniones sobre el cambio de entrenador. Neville, excapitán del United, sugirió que la marcha de Ten Hag era inevitable después de las recientes derrotas, mientras que Ferdinand manifestó a BBC News su confianza en Van Nistelrooy como nuevo líder interino. Por otro lado, Alan Shearer destacó la consistencia de la desunión en la directiva del club.
El paso de Erik ten Hag por el Manchester United ha sido una montaña rusa llena de emociones. A pesar de sus logros, la presión por conseguir resultados inmediatos y la falta de continuidad en el juego fueron factores determinantes en su salida. Ahora, el club deberá trabajar duro para encontrar un entrenador capaz de liderar un nuevo proyecto y devolver al United a su lugar en la élite del fútbol europeo.