Washington, DC prepara todo para uno de los eventos más grandes del año: el desfile militar por el 250 aniversario del Ejército de Estados Unidos. La cita será el 14 de junio, el mismo día que Donald Trump cumplirá 79 años. El evento, con cientos de vehículos y miles de soldados, ya provoca polémica por su escala, sus símbolos… y su precio.
Un festejo que puede costar hasta $45 millones
El Ejército reveló que el desfile y las actividades relacionadas podrían costar entre $25 millones y $45 millones. La teniente coronel Ruth Castro, vocera del Ejército, lo confirmó a CNBC y detalló que la cifra incluye varios actos durante todo el día.
Desde el Pentágono, el vocero Steve Warren explicó a The Washington Post que cada división asumirá el costo de transportar su personal y su equipo. “Cuando las unidades necesitan más dinero, les damos más dinero”, dijo.
6,600 soldados, 150 vehículos y 50 aviones
El desfile reunirá a 6,600 soldados, 150 vehículos militares y 50 aviones. Todas las divisiones activas del Ejército tendrán representación. El recorrido empezará a las 6:00 pm en el estacionamiento norte del Pentágono, cruzará el Puente Conmemorativo de Arlington y avanzará por la Constitution Avenue NW hasta la calle 15.
Durante el día habrá una exhibición aérea, conciertos, una competencia física, demostraciones de entrenamiento militar, fuegos artificiales y un espectáculo de los paracaidistas Golden Knights, que aterrizarán en The Ellipse, justo al sur de la Casa Blanca. En ese punto instalarán un escenario y una tribuna presidencial.
El gobierno habilitó edificios para alojar a los soldados
Para alojar a los participantes, el gobierno federal abrirá espacios vacíos en dos edificios céntricos. 3,000 soldados dormirán en instalaciones de la Administración de Servicios Generales y otros 2,000 en oficinas del Departamento de Agricultura, explicó Warren.
La mayoría llegará a la ciudad unos días antes y saldrá el 16 de junio. Los vehículos llegarán en tren y luego cruzarán la ciudad en camiones. Las aeronaves aterrizarán directamente en la región.
El desfile aumenta tensiones políticas en Washington
Aunque celebra la historia del Ejército desde 1775, la coincidencia con el cumpleaños de Trump alimenta la controversia. “Me enorgullece el cumpleaños del Ejército”, comentó Naveed Shah, director político de Common Defense, “pero este desfile parece más una celebración del ego del presidente que un homenaje a quienes arriesgan todo por el país”.
Protestas y recuerdos de otro intento fallido
Grupos como la Freedom Road Socialist Organization tramitaron permisos para manifestarse el mismo día. Su plan incluye una marcha desde Meridian Hill Park hacia el área del desfile. “Queremos mostrar rechazo al desfile y a la maquinaria de guerra”, afirmó Andy Koch, uno de los organizadores.
Este intento recuerda lo ocurrido en 2018, cuando Trump también impulsó un desfile, pero fracasó por el rechazo de autoridades locales. La alcaldesa Muriel Bowser lo enfrentó con un tuit que se volvió viral: “Tanks but No Tanks”.
Ahora, con Trump de regreso en la Casa Blanca, Bowser se mantiene cautelosa. Aunque no criticó directamente el evento, dijo el mes pasado que “si usan tanques, también deberían traer millones de dólares para reparar las calles”.
Historia, política y polémica se cruzan en una sola marcha
El desfile forma parte de una semana completa de actividades por la fundación del Ejército. El Congreso Continental lo creó en 1775 para enfrentar al Imperio británico. Además del desfile, habrá una carrera en Fort Myer y una exposición especial en el Museo Nacional del Ejército.
La última vez que Washington presenció un desfile militar de esta magnitud fue en 1991, cuando 800,000 personas homenajearon a los veteranos de la Guerra del Golfo. Esta vez, el público, la protesta y la política volverán a cruzarse… y las calles de la capital lo sentirán.