Elda Devarie no solo cruzó fronteras geográficas, también rompió barreras en la industria alimentaria y en el servicio comunitario. Nacida en Puerto Rico y criada entre negocios familiares, trajo consigo una visión audaz cuando llegó a Estados Unidos: abrir puertas para productos latinos mientras construía una red de apoyo para quienes más lo necesitaban. Como presidenta de EMD Sales y miembro de la junta de Bolsas de Amor, su trayectoria combina liderazgo, trabajo incansable y un fuerte sentido de propósito.
De Mayagüez a Nueva Jersey: una visión que desafió prejuicios
Elda Devarie nació en Puerto Rico y creció como la mayor de cuatro hermanos en una familia que manejaba una gasolinera y un restaurante. Esa experiencia la marcó: desde niña entendió el valor del esfuerzo y la importancia de servir a la comunidad. Tras estudiar contabilidad y mercadeo en la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, se unió a Grande Supermarket, una de las principales cadenas de supermercados de la isla en ese momento.
En 1987, emigró a Estados Unidos con su esposo, quien servía en la Marina. Se instalaron en Cape May, Nueva Jersey, donde Elda enfrentó las barreras que suelen limitar a las esposas de militares. Inicialmente, las empresas no confiaban en ella debido a lo que consideraban un estilo de vida temporal.
“Se negaron a darme empleo porque pensaban que solo estaría aquí por un año”, recordó en una entrevista para Baltimore Together (2023).
Desempleada y con la frustración de sentirse invisible laboralmente, encontró en la industria alimentaria una oportunidad para generar impacto.
EMD Sales: una visión que comenzó al volante
A pesar de los obstáculos, Elda fundó EMD Sales desde un cuarto en su casa. Comenzó a vender productos importados de Puerto Rico a pequeños comercios de Nueva York, con una visión ambiciosa y un espíritu imparable. En sus primeros años, manejaba todo sola, incluso aprendió a conducir un camión para recoger productos en Nueva York. Su hijo tenía apenas tres meses cuando consiguió su primera oficina fuera de casa en 1990.
“Cuando lo llevaba conmigo en la sillita del carro a las reuniones, era porque no tenía opción. Pero también me recordaba por qué estaba haciendo esto”, compartió en entrevista con El Tiempo Latino (2019).
Elda expandió su negocio gracias a una red de contactos que le sugirió abrir un almacén en Washington, DC. Ya instalada en Baltimore, expandió su red comercial en tiendas latinas independientes de Maryland, Virginia y DC. EMD Sales creció con el respaldo de alianzas estratégicas, como la que logró con la cadena Giant Food, que comenzó a distribuir sus productos tras una reunión clave.
Para 2025, EMD Sales ocupa un almacén de 153,000 pies cuadrados, cuenta con una flota de 18 camiones, emplea a más de 175 personas y distribuye más de 3,000 productos a 1,500 clientes, incluyendo supermercados, restaurantes y minoristas independientes en toda la región del Atlántico Medio. Entre sus socios figuran marcas como Grace, La Banderita e Ibarra, reflejando la diversidad de las cocinas latinoamericanas.
Bolsas de Amor: solidaridad empacada con propósito
El compromiso de Elda con la comunidad no se limita a los negocios. Tras leer un artículo sobre la crisis alimentaria en bancos de alimento, unió fuerzas con socios y creó Bolsas de Amor en 2009. Ese primer año, la organización distribuyó 300 bolsas con comida y productos esenciales a familias de bajos recursos en el área metropolitana de DC.
En 2024, con motivo de su 15º aniversario, Bolsas de Amor reportó haber beneficiado a más de 4,000 personas al año, y movilizó recursos clave en momentos de crisis. Durante el huracán María en 2017, la organización coordinó el envío de 14 contenedores con más de 500,000 libras de alimentos y suministros a Puerto Rico.
“Fue impresionante ver cómo personas de todos lados quisieron ayudar. Fue una verdadera muestra de solidaridad”.
En su labor como miembro de la junta de Bolsas de Amor, Elda sigue liderando campañas y distribuciones de alimentos en el DMV, además de responder a emergencias en países como Perú y Guatemala.
Una empresa familiar con raíz y corazón
La familia ha sido el pilar más importante en la trayectoria de Elda. Su hijo Roberto, su hermana Carmen y su cuñado Antonio trabajan con ella, formando un equipo que describió como “imparable”. Su enfoque en la comunidad, tanto personal como profesionalmente, refuerza su filosofía de vida. A pesar de las largas jornadas y el estrés que conlleva dirigir una empresa, destacó el valor de compartir las responsabilidades con seres queridos. Para Elda, el éxito personal y empresarial siempre irá acompañado de un fuerte compromiso con la familia.
“Para mí, la familia es el ancla de todo. Hacemos esto juntos y con propósito”.
Líder e inspiración en la industria
En 2018, la revista Hispanic Lifestyle la incluyó en su lista de Latinas of Influence, reconociendo su impacto como empresaria y filántropa. En años posteriores, ha recibido el Outstanding Small Business Award de la Cámara de Comercio de Maryland y el reconocimiento Top Women in Grocery por parte de Progressive Grocer. En 2023, la organización Children’s Cancer Foundation le entregó el premio “Gift of Life” por su apoyo sostenido a niños con cáncer en Maryland.
En 2025, Elda continúa liderando EMD Sales con planes de ampliar su catálogo de productos étnicos y reforzar alianzas con cadenas como Giant Food, Wegmans y Safeway. A nivel comunitario, busca aumentar la capacidad logística de Bolsas de Amor para cubrir emergencias más allá del área DMV.
“La comunidad me dio tanto; siempre me sentiré comprometida a devolver lo que pueda”, afirmó.
Su legado combina propósito, perseverancia y una ética de servicio profundamente enraizada en su identidad puertorriqueña. En palabras de Baltimore Together (2023), “la historia de Elda Devarie es una muestra de cómo una mujer puede redefinir el éxito cuando pone su corazón al centro del negocio”.