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Bajaron los delitos en PG County mientras DC lidia con muertes en la cárcel

Cómo Prince George’s controla el crimen mientras DC enfrenta caos carcelario.

Foto: Pixabay.

Prince George’s County bajó sus cifras de crimen por segundo año seguido. A solo unos kilómetros, DC mantiene una cárcel donde los presos mueren por sobredosis y donde hasta las paredes se convierten en armas. El área metropolitana de Washington vive dos realidades opuestas del sistema de justicia.

PG County: menos delitos y plan especial para el verano

En una rueda de prensa esta semana, el jefe de policía Malik Aziz informó que los delitos bajaron en lo que va de 2025. Según WTOP, la policía ya se prepara para el verano, cuando el crimen suele subir por el fin de clases y las altas temperaturas.

Aziz explicó que este año aplicarán un enfoque más detallado. Dividieron todo el condado en 1,588 hexágonos (cada uno de 1,000 metros de diámetro) para detectar las zonas con más incidentes. Algunas de las áreas más críticas son:

  • Largo Town Center
  • La intersección de Cherry Hill Rd y Powder Mill Rd
  • Brooks Drive con Marlboro Pike
  • Kentland
  • Brandywine Crossing

La policía enfoca su atención en los 25 hexágonos más problemáticos, donde aumenta la vigilancia y se coordina con líderes comunitarios y comercios. Según Aziz, “la mayoría de los crímenes ocurre en zonas pequeñas, no en barrios completos”.

¿Qué incluye el plan para este verano?

  • Patrullas en bicicleta para reforzar la presencia en la calle.
  • Todos los oficiales, incluso quienes no patrullan normalmente, saldrán a la calle por al menos dos semanas.
  • Trabajo en equipo con la comunidad y otros organismos de seguridad.
  • Mayor uso de Crime Solvers, una línea de pistas que ha ayudado a cerrar más casos gracias a los datos que envían los vecinos.

La jefa interina del condado, Tara Jackson, destacó que el éxito depende del apoyo de la gente:

“El gobierno no puede estar en todas partes. Necesitamos que madres, padres, abuelos y vecinos se involucren con nosotros”, dijo Jackson a WTOP.

También subrayó que los incidentes los provocan “un pequeño grupo de jóvenes”, y que con unidad se pueden prevenir más delitos.

DC: una cárcel en crisis total

Mientras Prince George’s invierte en prevención, DC vive una emergencia dentro de su principal centro de detención. Según un nuevo informe de la Oficina de la Auditora del Distrito, citado por NBC Washington, las condiciones en la cárcel siguen siendo peligrosas y deterioradas.

¿Qué reveló el informe?

  • Las muertes en la cárcel triplican el promedio nacional.
  • Las muertes por sobredosis son 10 veces más altas que en otras cárceles del país.
  • El personal usa narcan frecuentemente para revivir a internos que consumieron drogas.
  • La infraestructura está tan vieja y dañada, que los presos arrancan pedazos de paredes o ventanas para fabricar armas.
  • Falta de personal para mover internos de manera segura. En al menos un caso, eso terminó en una muerte.

La auditora Kathy Patterson fue clara:

“Hay un problema serio de drogas y salud mental. Necesitamos una cárcel nueva con urgencia”, afirmó.

¿Qué solución proponen?

Durante la presentación del presupuesto, Patterson celebró que la alcaldesa Muriel Bowser y el administrador Kevin Donahue reconocieran el problema. Según Patterson, ya hay dos propuestas de empresas privadas que quieren construir una nueva cárcel para luego alquilársela al gobierno del Distrito.

Así, DC no pagaría la obra directamente, sino que firmaría un contrato de arrendamiento a largo plazo con el constructor.

Un sistema, dos extremos

PG County muestra qué puede lograrse cuando la policía actúa con estrategia y escucha a su comunidad. DC, en cambio, enfrenta las consecuencias de descuidar lo que pasa después de los arrestos. El sistema de justicia no termina en la patrulla ni en la corte: continúa en las cárceles, donde muchas veces se rompe el último eslabón de la dignidad humana.

Mientras un condado se enfoca en no perder a sus jóvenes, una ciudad lucha por dejar de condenarlos a muros que literalmente se desmoronan. El mensaje queda claro: ninguna estrategia de seguridad está completa si no cuida a todas las personas en todas sus etapas, incluso cuando están tras las rejas.

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