Las políticas migratorias siguen marcando diferencias entre estados. Mientras algunas regiones del país aumentan su colaboración con ICE, otras fortalecen los lazos comunitarios para apoyar a los inmigrantes. En el área del DMV (DC, Maryland y Virginia) se vive una mezcla de ambos escenarios.
Cinco estados lideran redadas contra inmigrantes
Según un análisis del medio Axios, cinco estados concentran las operaciones más agresivas contra inmigrantes: Texas, Florida, Georgia, Carolina del Norte y Virginia. En estos lugares, las policías locales firmaron acuerdos llamados 287(g), que les permiten actuar como agentes de inmigración.
- Hay 629 acuerdos 287(g) activos en el país.
- Florida tiene el 43%.
- Texas, el 14%.
- Georgia, el 5%.
Estos convenios hacen posible redadas masivas. En Florida, por ejemplo, una reciente operación llamada Tidal Wave terminó con 1,120 arrestos.
Virginia también destaca por su colaboración con ICE, a pesar de que muchas de sus ciudades, como Alexandria o Arlington, tienen gobiernos locales demócratas que buscan proteger a los inmigrantes.
¿Y qué pasa en el área de DC?
En la región del DMV (DC, Maryland, Virginia), el panorama es mixto. En Virginia, las redadas se sienten más intensas, mientras que en DC y Maryland, las autoridades locales han limitado su cooperación con ICE.
Aun así, las redadas no se detienen. En abril de 2025, varias operaciones en el área de Washington encendieron las alarmas. Como escribimos antes, organizaciones como CASA activaron redes de respuesta rápida, líneas de emergencia y equipos legales para asistir a las familias afectadas.
“Estamos viendo cómo el miedo regresa. Pero también vemos solidaridad”, dijo Gustavo Torres, director ejecutivo de CASA.
Las cifras que revelan el panorama
Datos del centro TRAC de la Universidad de Syracuse muestran la magnitud del problema:
- En marzo de 2025, se emitieron 42,000 órdenes de deportación en todo el país.
- Casi la mitad se concentró en cinco estados: Texas, California, Nueva York, Virginia y Florida.
- El condado de Harris, Texas (Houston) tuvo 2,460 órdenes de remoción, más que cualquier otro lugar.
- Miami-Dade, Florida, encabeza los casos pendientes: 154,974 personas esperan una decisión migratoria.
- En Virginia, las cifras también van en aumento, aunque sin datos tan altos como los de Florida o Texas.
¿Por qué no hay redadas por igual en todo el país?
Hay dos grandes razones:
- Falta de recursos federales: No hay suficientes agentes de ICE para cumplir la meta de deportar a un millón de personas al año, como buscaba Trump.
- Resistencia local: En muchas áreas rurales o estados conservadores, los sheriffs no pueden —o no quieren— sumarse a las redadas.
Jonathan Thompson, director de la Asociación Nacional de Sheriffs, explicó en entrevista con Axios que muchos departamentos simplemente no tienen:
- Personal suficiente
- Espacio en cárceles
- Presupuesto extra para colaborar
“Incluso el sheriff de Canyon County, Idaho, quiere ayudar... pero no puede. No tiene los recursos”, dijo Thompson.
Además, agregó que muchos temen dañar la relación con sus comunidades. “Me han dicho que, si van a sacar a alguien, lo hagan con debido proceso”, contó.
¿Se puede hacer esto sin perder la confianza?
El exdirector de ICE, Tom Homan, piensa que sí. Para él, los acuerdos 287(g) ayudan a que ICE “multiplique su fuerza” y arresta principalmente a criminales.
“Incluso las comunidades inmigrantes —aunque sean indocumentadas— no quieren criminales cerca”, dijo Homan en Axios.
Pero organizaciones defensoras, como el American Immigration Council, opinan distinto. Su directora de políticas, Nayna Gupta, advirtió que estos pactos dañan la seguridad pública.
“Cuando la policía actúa como ICE, la gente tiene miedo de denunciar delitos o buscar ayuda”, señaló en Axios.
En el DMV, la comunidad se organiza
En 2025, las políticas migratorias dibujan un mapa desigual en Estados Unidos. Mientras en algunos estados las redadas se intensifican con apoyo de autoridades locales, en otros crecen las redes de solidaridad y el rechazo a colaborar con ICE. El área del DMV refleja esa tensión: en Virginia, las detenciones aumentan con ayuda de acuerdos como el 287(g); en cambio, en DC y Maryland, las comunidades y gobiernos locales fortalecen sus estrategias de protección y apoyo.
El debate sobre cómo aplicar la ley migratoria continúa abierto, y no hay una sola forma de enfrentarla. Lo que sí está claro es que las decisiones locales marcan la diferencia. Y en medio de esa diferencia, muchas familias siguen buscando estabilidad, apoyo y respeto en un sistema que todavía no trata igual a todos.