Las Escuelas Públicas de Washington DC anunciaron que a partir del otoño de 2025 vetarán el uso de celulares y otros dispositivos electrónicos personales durante el horario escolar. Esta medida impactará a más de 52,000 estudiantes y busca mejorar el ambiente de aprendizaje en las aulas.
¿Por qué prohibir los celulares?
El canciller de las escuelas públicas, Lewis D. Ferebee, explicó que esta decisión se basa en investigaciones que demuestran los efectos negativos de los teléfonos en el entorno escolar.
“Hemos reconocido que el uso de smartphones afecta el aprendizaje y las relaciones entre estudiantes y maestros”, comentó Ferebee.
Un piloto realizado en las escuelas secundarias ya mostró resultados prometedores. Los estudiantes reportaron una mejor convivencia con sus compañeros y docentes, además de una reducción en niveles de ansiedad, según NBC News.
Investigaciones adicionales también vinculan el uso excesivo de celulares con problemas de salud mental, dificultades para concentrarse en clase e incrementos en el ciberacoso, según declaraciones oficiales.
Dispositivos afectados y excepciones
La nueva política no solo limitará celulares. También abarcará relojes inteligentes, audífonos Bluetooth y tabletas personales que puedan conectarse a WiFi o datos móviles. Estos dispositivos permanecerán apagados y guardados durante el día escolar, salvo casos específicos.
Por ejemplo, estudiantes con discapacidades o necesidades médicas podrán usar sus dispositivos si el maestro lo permite. Además, alumnos que estudian en varios idiomas podrán acceder a aplicaciones de traducción bajo circunstancias específicas. Como mencionamos en un artículo anterior, los dispositivos emitidos por la escuela seguirán disponibles para tareas escolares.
Flexibilidad en la implementación
Cada escuela podrá ajustar esta política a las necesidades particulares de su comunidad. En algunos casos, los estudiantes deberán entregar sus dispositivos, los cuales se almacenarán en sus casilleros o en fundas magnéticas hasta el final de la jornada. DCPS reiteró que esta flexibilidad tiene como objetivo garantizar un entorno más armonioso y enfocado en el aprendizaje.
Ya se ha aprobado una legislación preliminar en el Concejo de DC para extender esta política a las 134 escuelas chárter de la ciudad, aunque su aplicación completa ocurrirá hasta el ciclo escolar 2026-2027 debido a preocupaciones logísticas.
Opiniones divididas
Muchas familias están de acuerdo con estas restricciones, creyendo que mejorarán la atención de los alumnos en clase. Sin embargo, algunos padres expresaron preocupación por estar incomunicados en situaciones de emergencia, como tiroteos en escuelas.
El canciller Ferebee aclaró que las escuelas tienen protocolos claros para contactar a las familias en casos críticos mediante mensajes de texto, llamadas automáticas y correos electrónicos. Además, enfatizó que los celulares pueden distraer a los estudiantes de las indicaciones importantes en una emergencia.
“En estas situaciones, necesitamos que sigan las instrucciones de los adultos en la escuela, no que se concentren en comunicarse con sus celulares”, sostuvo.
Un cambio que ya impacta
Entre los estados que han adoptado medidas similares se encuentran Florida, Virginia y California. Según The Washington Post, varias de estas regiones han informado mejoras tanto en el rendimiento académico como en la convivencia escolar.
Con esta nueva regla, las Escuelas Públicas de DC buscan fomentar la excelencia académica y reducir los factores que afectan la salud mental de los jóvenes, todo con miras a crear entornos educativos más saludables para sus estudiantes.