Cinco días de ataques parecen una eternidad. Israel e Irán continúan la escalada en un contexto internacional complicado (para ambas naciones). Los misiles israelíes comenzaron a llegar a Irán la madrugada del viernes pasado y desde entonces han dejado más de 200 muertos, instituciones científicas, estratégicas y políticas destruidas e importantes líderes iraníes muertos, incluido Ali Shadmani, el nuevo jefe del Estado Mayor de Irán en tiempos de guerra.
Los misiles de Irán también han provocado caos y miedo en territorio israelí dejando 24 muertos, y varias instalaciones importantes afectadas. Todo esto mientras Estados Unidos se mantiene de espectador, esperando que Irán regrese debilitado y acepte el acuerdo nuclear por el que comenzó todo.
Que sí, que no, que todo está under control. Trump volvió a hablar del conflicto entre Israel e Irán: luego de haber afirmado que Estados Unidos no iba a intervenir directamente en los ataques, el presidente publicó en sus redes sociales que tiene “el control total y completo de los cielos de Irán”. ¿Más leña al fuego? Dijo que el ayatolá Ali Jamenei es "un blanco fácil".
Todas las opciones están sobre la mesa.
- El conflicto entre Israel e Irán se veía a venir. El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu avisaba que se estaba agotando el tiempo mientras la Casa Blanca se reunía con líderes iraníes para cerrar el acuerdo nuclear. ¿El objetivo? Que Irán no fabricase armas nucleares. Este fue el punto inicial para que el gobierno de Israel lanzara los ataques. Desde entonces, Estados Unidos ha mantenido una postura mediadora. Pidiéndole a Irán que ceda y acepte el acuerdo nuclear por el que tanto se reunieron meses antes.
- Irán, se mantiene firme, dice que está en todo su derecho de defenderse y por los vientos que soplan, no firmará ningún acuerdo. Israel, que aparentemente ya destruyó parte de la flota nuclear iraní, ahora tiene otro interés: el alto mando político iraní (o quizás, este siempre fue su objetivo). ¿El plot twist? El cambio de dirección de Washington: las declaraciones de Trump vienen con otro tono y el Pentágono ya está moviendo sus fichas en la región, para “estar preparados” en un “por si acaso”.
- El presidente se reunió este martes con Steve Witkoff, enviado especial para Medio Oriente y otros líderes militares en la Casa Blanca y según explica NBC News, Trump estaría considerando diversas opciones con relación a Irán incluyendo un ataque estadounidense. El domingo, el mandatario escribía en Truth Social: “Irán e Israel deberían hacer un trato, y harán un trato, igual que conseguí que hicieran India y Pakistán”. ¿La diferencia de ese conflicto con el actual? Que Israel, necesita la potencia de fuego de Estados Unidos, no su intervención diplomática.
Entre líneas. ¿Qué pasaría si EEUU decide no meterse más y alejarse del conflicto? Sería un terreno complicado para Israel: sin la participación militar de Washington, que incluye tanto apoyo logístico como la potencia de fuego para destruir los búnkeres, las capacidades de Irán sobrevivirían incluso a un bombardeo prolongado por parte de Israel.
Por ahora, el escenario está así: Israel quiere disuasión. Irán quiere resistencia. Y EEUU quiere resultados… sin involucrarse demasiado.