El pasado domingo, Tesla encendió los motores de su esperada prueba de robotaxis en Austin, Texas. Anunciado por el propio Elon Musk en X, la prueba permite a clientes seleccionados disfrutar de un viaje por una tarifa plana de $4.20. Según el informe original, los vehículos utilizados son de 10 a 20 SUVs Model Y, operando en un área específicamente delimitada. Como medidas de seguridad, estos coches cuentan con teleoperadores y un empleado de Tesla que puede intervenir si es necesario.
Reacción del mercado y preocupaciones
El mercado reaccionó positivamente al lanzamiento, llevando a un aumento del 8.2% en las acciones de Tesla el lunes. A pesar del entusiasmo inicial, el analista de Barclays, Dan Levy, expresó preocupaciones sobre la capacidad de Tesla para escalar este negocio y recomendó cautela frente al optimismo excesivo. No obstante, los analistas de Wedbush, como Dan Ives, describieron la experiencia de los robotaxis como cómoda, segura y personalizada.
Experiencia de usuario y seguridad
Los robotaxis de Tesla no son sólo eficientes, sino que también ofrecen entretenimiento. Los usuarios pueden sincronizar sus cuentas Tesla para acceder a aplicaciones de streaming como Netflix, Spotify, Hulu y Disney+. Durante una prueba, los vehículos navegaron eficazmente por situaciones complicadas, demostrando seguridad y control. Ives destacó un episodio en el que un robotaxi enfrentó tráfico en una calle estrecha con precisión y paciencia.
Mira hacia el futuro
Elon Musk tiene grandes planes para los robotaxis de Tesla, anticipando millones de estos vehículos en funcionamiento para la segunda mitad de 2026. Además, se esperan futuras innovaciones, como la integración de Grok y personalización del interior de los coches. Sin embargo, Tesla aún no ha anunciado cuándo el público en general podrá acceder a este servicio en Austin.
Preocupaciones regulatorias
Por último, la seguridad es un punto crucial en las operaciones de robotaxis. Tesla ha mantenido confidencial la información sobre sus respuestas a las preguntas de seguridad de la NHTSA, considerándola confidencial. Con altos estándares y vigilancia, Tesla busca abordar cualquier inquietud antes de una implementación más amplia.
