Las acciones de EE. UU. subieron con fuerza el martes, a medida que crecían las esperanzas de que un frágil alto el fuego negociado por Estados Unidos entre Israel e Irán sentaría las bases para un fin más permanente de las hostilidades.
El Nasdaq Composite (^IXIC), de gran peso tecnológico, lideró el avance con una ganancia de aproximadamente el 1.6%. El S&P 500 (^GSPC) añadió alrededor del 1.2%, lo que puso a ambos índices en camino de lograr sus mejores cierres desde febrero y acercarse a máximos históricos. Por su parte, el Dow Jones Industrial Average (^DJI) repuntó aproximadamente un 1.3%, sumando más de 500 puntos.
Un rally de alivio se ha estado gestando en medio de las esperanzas de un fin duradero para el conflicto de 12 días en Oriente Medio, que había inquietado a los mercados por los riesgos de una interrupción del suministro de petróleo y una escalada hacia una guerra a gran escala. El lunes, las acciones estadounidenses ya habían subido, ya que la respuesta de Irán a los ataques de EE. UU. sugirió un deseo de desescalar las tensiones.
El martes, el expresidente Donald Trump afirmó que la pausa en las hostilidades había comenzado. Mientras tanto, Israel confirmó que había acordado una tregua negociada por EE. UU. y anunciada por Trump a última hora del lunes. Sin embargo, apenas unas horas después, Israel acusó a Irán de incumplir el alto el fuego. Aunque Trump arremetió contra ambas partes, la frágil tregua pareció mantenerse por ahora.
El Petróleo en Descenso y las Declaraciones Clave de Jerome Powell
Los precios del petróleo continuaron su descenso, ya que la perspectiva de una tregua duradera alivió las preocupaciones sobre la interrupción del suministro de crudo. Estas preocupaciones se centraban principalmente en el riesgo de que Irán bloqueara el crucial estrecho de Ormuz, una vía clave para los petroleros. Los futuros del Brent (BZ=F) y del West Texas Intermediate (CL=F) se movieron hacia los niveles vistos antes del estallido del conflicto.
Mientras tanto, el testimonio del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara también estuvo en el punto de mira. Powell afirmó que el banco central podría recortar las tasas "más pronto que tarde", aunque también indicó que podía permitirse "esperar" para ver el impacto de la inflación impulsada por los aranceles.
En sus declaraciones preparadas, Powell reiteró su postura de que la Reserva Federal puede permitirse mantener las tasas de interés estables por ahora, diciendo: "Por el momento, estamos bien posicionados para esperar y obtener más información sobre el curso probable de la economía antes de considerar cualquier ajuste a nuestra postura política".
