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DC ocupa el segundo lugar entre las ciudades más peligrosas para conducir en 2025

Washington DC, segunda en riesgos para conducir con 172.4% de probabilidad de colisión, enfrenta retos significativos.

Foto: Foto de JESHOOTS.com/Pexels.

El 2025 Allstate America's Best Drivers Report® colocó a Washington DC como la segunda ciudad más riesgosa para conducir en Estados Unidos, con una probabilidad relativa de colisión alarmante de 172.4%. Solo Boston, con un 244%, supera este preocupante ranking. Estas cifras subrayan la creciente desigualdad entre las ciudades más seguras y peligrosas para transitar.

Seguridad vial en la capital bajo la lupa

La seguridad vial en DC es un problema complejo donde infraestructura y conductas humanas convergen. Según datos de The Washington Post, más de 100 peatones murieron anualmente entre 2022 y 2024, duplicando las cifras de hace una década. Actualmente, se registran 2 muertes por cada 100,000 habitantes.

La poca iluminación en muchas calles tiene un rol crucial en esta crisis. Entre 2022 y 2024, al menos 29 peatones fallecieron en carreteras oscuras dentro de DC, mientras que tragedias similares ocurrieron en áreas suburbanas de Maryland y Virginia. Sharon Kershbaum, directora de Transporte de DC, comentó que el 80% de las muertes están relacionadas con comportamientos peligrosos como el exceso de velocidad, manejar autos robados y huir de la escena tras un accidente. Estas circunstancias, sumadas a la falta de infraestructura adecuada, delimitan un panorama sombrío.

Vigilancia insuficiente, accidentes en aumento

En Washington DC, las multas emitidas por exceso de velocidad disminuyeron drásticamente en los últimos años. En 2019, la policía registró más de 10,000 infracciones por esta causa, pero entre 2023 y 2024 la cifra cayó a solo 4,650, informó The Washington Post. Este descenso en la vigilancia coincide con un aumento significativo de choques fatales y atropellos nocturnos. El concejal Charles Allen enfatizó la naturaleza urgente de este problema, diciendo que las víctimas no son meras estadísticas.

“Estas son vidas preciosas. Debemos actuar con rapidez para garantizar su seguridad”, afirmó.

En comparación con el resto de Estados Unidos

Mientras DC lidia con estos desafíos, otras grandes ciudades como Baltimore, Filadelfia y Los Ángeles enfrentan problemas similares, todas apareciendo en el top 10 de las más peligrosas, según Allstate America's Best Drivers Report®. En contraste, localidades como Brownsville y Laredo en Texas lideran los rankings de seguridad. Brownsville, por ejemplo, registró una reducción en la probabilidad de colisión de -25.9%, demostrando que cambios estratégicos pueden marcar una gran diferencia.

Esperanza desde el estado de Washington

A nivel estatal, Washington logró una reducción significativa de muertes en carreteras, bajando un 10% en 2024 tras alcanzar un pico récord en 2023 con 809 fatalidades. Según la Washington Traffic Safety Commission, aunque aún hubo 731 muertes el año pasado, algunas intervenciones rindieron frutos, como la implementación de cámaras de velocidad y el diseño de calles más seguras.

Shelly Baldwin, directora de la comisión, destacó nuevas tácticas, como dispositivos limitadores de velocidad para reincidentes y educación vial obligatoria hasta los 21 años, como medidas efectivas para reforzar la seguridad. Dicha combinación de regulación y prevención podría servir de modelo para la capital.

Qué se necesita para salir adelante

Aunque Washington DC ha introducido algunas soluciones, como la instalación de cámaras de control de velocidad, expertos consideran que el trabajo sigue siendo insuficiente. Jonathan Adkins, de la Asociación de Seguridad Vial de Gobernadores, hizo un llamado contundente.

“Sabemos qué debemos hacer, pero lo más importante es tener la decisión política para implementarlo”, comentó.

Por otro lado, programas como Drivewise, de Allstate, han demostrado ser útiles para fomentar hábitos responsables. Quienes los utilizan tienen un 25% menos de probabilidad de involucrarse en accidentes graves.

Washington DC se enfrenta a un momento crítico. Aunque salir de la lista de las ciudades más peligrosas para conducir no es sencillo, otros ejemplos como el estado de Washington en general muestran que con inversión en infraestructura, vigilancia eficiente y educación comunitaria, la tendencia se puede revertir.

La seguridad vial en DC no debe discutirse en términos abstractos, sino como una prioridad para proteger las vidas de quienes recorren sus calles a diario. Es momento de transformar las estadísticas en acción y construir una ciudad donde todos puedan sentirse seguros detrás del volante o al caminar.