El sistema de software para vehículos de Apple, CarPlay Ultra, está enfrentando una fuerte resistencia por parte de los fabricantes de automóviles. Según un informe del Financial Times de este miércoles (25 de junio), compañías de renombre como Mercedes-Benz, Audi, Volvo, Polestar y Renault han declarado que no planean integrar este software en sus vehículos, a pesar de que Apple había indicado previamente lo contrario.
Aunque pocas empresas automotrices han llegado tan lejos como General Motors, que en 2023 anunció que dejaría de usar CarPlay y Android Auto de Google en sus vehículos eléctricos, existe un creciente debate sobre hasta qué punto los fabricantes de automóviles deben permitir que las empresas tecnológicas tomen el control de las operaciones de un vehículo.
CarPlay Ultra: ¿Innovación o Exceso de Control?
CarPlay Ultra conecta el coche a las funciones de música y mapas del iPhone del conductor, además de acceder a información del vehículo como la temperatura, la velocidad y el uso del combustible. Sin embargo, algunos fabricantes de automóviles consideran esto un exceso de intromisión. Un ejecutivo de Renault, que está desarrollando un vehículo utilizando software de Google y Qualcomm, afirmó que la automotriz francesa le dijo a Apple: "No intenten invadir nuestros propios sistemas".
Mientras que Aston Martin se convirtió en la primera compañía de automóviles en introducir el sistema de Apple en sus vehículos, muchos de sus contemporáneos están desarrollando sus propios sistemas de infoentretenimiento. Su objetivo es generar más ingresos a partir de los servicios dentro del coche y los datos del vehículo, lo que representa una importante fuente de monetización futura.
El Futuro del Coche Conectado: Más Allá de la Pantalla
PYMNTS ya analizó los posibles beneficios de los coches conectados a principios de este año en una entrevista con Niclas Gyllenram, CEO de AiDEN Automotive. Gyllenram señaló que los conductores pasan un promedio de 72 minutos al día en sus vehículos, lo que ofrece a las empresas automotrices la oportunidad de transformar este tiempo de pantalla en experiencias fluidas y convenientes que mejoren la conducción sin distracciones.
"Los vehículos conectados están a punto de convertirse en un elemento central del ecosistema de comercio electrónico automotriz", dijo Gyllenram. "A diferencia de su teléfono o computadora portátil, donde la pantalla es el enfoque principal, la pantalla del automóvil es una herramienta secundaria que puede mejorar la experiencia de conducción en lugar de distraerla". Por ejemplo, los vehículos conectados pueden comprender su entorno, un nivel de conciencia contextual que proporciona recomendaciones personalizadas y relevantes.
