La inflación subyacente en Tokio se desaceleró en junio debido a cortes temporales en las facturas de servicios públicos, pero se mantuvo por encima del objetivo del 2% del Banco de Japón. Según el informe original, el índice de precios al consumidor (CPI) de Tokio, excluyendo los costos volátiles de alimentos frescos, aumentó un 3.1% en comparación con el año anterior, ligeramente por debajo del pronóstico del mercado del 3.3%.
Presión en los costos de alimentos
El precio de los alimentos, excluyendo los artículos volátiles como las verduras, aumentó un 7.2% en junio en comparación con el año anterior, acelerándose desde el 6.9% del mes anterior. Destaca el fuerte incremento en el costo de alimentos básicos: los hogares en Tokio pagan un 89% más por el arroz, un 48% más por una barra de chocolate y un 50% más por una bolsa de granos de café en comparación con el año pasado.
Subsidios e inflación en el sector servicios
El resurgimiento de los subsidios al combustible y los cortes temporales en las tarifas de agua en Tokio han sido factores clave en la desaceleración de la inflación. Sin embargo, la inflación en el sector servicios sigue siendo significativa, situándose en un 2.1% en junio, después de alcanzar el 2.2% el mes anterior. Marcel Thieliant, de Capital Economics, señala que, a pesar de la desaceleración, la inflación subyacente sigue superando las previsiones del Banco de Japón, lo que podría llevar a un aumento de tasas en octubre.
Desafíos económicos y políticas del Banco de Japón
El Banco de Japón, que salió de un programa de estímulo radical el año pasado, ha estado ajustando su política monetaria. En enero, incrementaron las tasas de interés a corto plazo al 0.5%. A pesar de las señales de disposición para aumentar aún más las tasas, el impacto económico de los aranceles en EE.UU. ha obligado al Banco a revisar a la baja sus previsiones de crecimiento en mayo. Con la inflación superando el objetivo del 2% durante más de tres años, Naoki Tamura, miembro de la junta del BOJ, advierte sobre la necesidad potencial de aumentar las tasas "decisivamente" si los riesgos inflacionarios aumentan.
Próxima revisión del Banco de Japón
El Banco de Japón planea examinar estos datos en su próxima revisión de tasas del 30 al 31 de julio. Esta reunión será crucial para determinar el futuro de las políticas monetarias del país, ya que se emitirán nuevos pronósticos trimestrales de crecimiento y precios. La inflación continúa siendo un desafío para una economía sujeta a presiones internacionales y aumento de costos locales.
