Por Evaristo Lara, Huella Zero
Las mujeres embarazadas que viven en zonas agrícolas podrían experimentar nacimientos prematuros por la exposición, sin saberlo, a un contaminante común presente en el agua potable.
Un estudio difundido por la organización sin fines de lucro denominada PLOS detectó la presencia de un contaminante llamado nitrato en el agua de consumo diario, la cual también es utilizada para regar los campos de cultivo.
La ingesta de este compuesto natural, incluso en pequeñas cantidades, puede alterar el desarrollo del embarazo y provocar partos prematuros.
En los recién nacidos, la exposición prenatal puede resultar en bajo peso al nacer, lo que los vuelve más vulnerables y con mayor riesgo de morir en las primeras horas o semanas de vida.
Aunque el nitrato puede ser perjudicial para las mujeres embarazadas al ser ingerido en el agua, es un compuesto necesario para la supervivencia de las plantas e incluso de algunos animales.
Sin embargo, su uso creciente en fertilizantes inorgánicos ha aumentado su presencia en el medio ambiente, lo que representa un problema no solo para las mujeres embarazadas.
El estudio señala que, al consumir agua con altos niveles de nitrato, esta sustancia puede interferir con la capacidad de la sangre para transportar oxígeno.
Aunque desde 1992 la Agencia de Protección Ambiental (EPA) estableció un límite máximo para el nitrato en el agua potable, hasta hoy no reconoce oficialmente los efectos que puede causar en mujeres embarazadas que lo consumen sin saberlo.
Jason Semprini, profesor adjunto de economía de la salud pública en la Universidad de Des Moines y autor del estudio difundido por PLOS, analizó 357,741 registros de nacimiento en Iowa entre 1970 y 1988.
Su metodología consistió en vincular las mediciones de nitrato, tomadas a nivel de condado, con los 30 días posteriores a la concepción.
De este modo, comprobó que la exposición al nitrato estaba asociada con un aumento en los casos de nacimientos prematuros y de bebés con bajo peso al nacer.
“No existe un nivel seguro de exposición prenatal al nitrato. Si ignoramos el daño potencial de los niveles más bajos de exposición prenatal a nitratos, las normas regulatorias actuales no protegen adecuadamente a las madres ni a los niños de Estados Unidos”, concluyó.
Semprini también descubrió que el impacto de la exposición prenatal al nitrato equivale aproximadamente al 15% del daño que causa el consumo de cigarrillos durante el embarazo.