El gigante de licores Diageo no se queda callado ante las acusaciones que lo señalan por prácticas engañosas respecto a sus populares tequilas. Según el informe original, Diageo presentó una respuesta inicial a una demanda que cuestiona la pureza de sus marcas Casamigos y Don Julio. La empresa calificó de "infundadas" estas alegaciones y está decidida a defenderse con todo.
Acusaciones y demanda colectiva
En mayo, estalló una polémica cuando se presentó una demanda colectiva en un tribunal federal en Brooklyn. La denuncia apunta a que Diageo habría engañado a los consumidores en EE.UU. al publicitar sus tequilas Casamigos y Don Julio como "100% agave", mientras que, según los demandantes, contienen otros tipos de alcohol que incumplen estándares de pureza en EE.UU. y México. Además, dos demandas similares se presentaron en California y Florida.
Pruebas y reacciones de Diageo
Parte de la controversia se centra en pruebas de isótopos de carbono encargadas por los demandantes, que sugieren que algunas versiones de los tequilas contienen entre el 33% y el 42% de etanol derivado del agave. Diageo, por su lado, asegura que todos sus tequilas etiquetados como "100% agave" son realmente de 100% agave Azul Weber y pasan por un proceso de certificación rigorosa e independiente. La empresa desestima las acusaciones como "escandalosas y categóricamente falsas".
Regulaciones y etiquetado en la industria tequilera
El debate sobre la auténtica pureza del tequila no es exclusivo de Diageo. El Consejo Regulador del Tequila (CRT) de México ha cuestionado las afirmaciones de "sin aditivos", advirtiendo a algunas marcas que podrían perder sus licencias de exportación si no eliminan estas etiquetas engañosas. Según las regulaciones mexicanas, el tequila puede contener hasta 75 gramos de aditivos por litro, lo cual incluye colorantes y edulcorantes.
El caso es llevado por el abogado Steve Berman, mientras que su colega Robert Tolchin no ha comentado de inmediato al respecto. Por lo pronto, Diageo está lista para defender la calidad de sus productos, y la disputa refleja una preocupación más amplia en la industria sobre qué tan "puro" es realmente el tequila que disfrutamos.
