Según el informe original, Comcast ha anunciado los nombres de los miembros que formarán parte de la primera junta directiva de Versant Media Group. Esta nueva entidad es una escisión de Comcast que asumirá gran parte de las redes de cable de NBCUniversal, tales como USA Network, CNBC y MSNBC. La formación de esta junta es un paso significativo hacia la ejecución de la escisión, la cual está prevista para completarse este año.
En la junta directiva estarán figuras clave como el CEO de Versant, Mark Lazarus, y el presidente David Novak. Junto a ellos, otros ocho miembros aportarán su vasta experiencia en áreas como la inteligencia artificial, la gobernanza corporativa y la negociación de acuerdos. Entre los nombres mencionados figuran Rebecca Campbell, antigua ejecutiva de Disney, y Creighton Condon, abogado senior en A&O Shearman. También se sumarán Michael Conway, ex CEO de Starbucks North America, y David Eun, asesor fundador de la startup Kanza AI.
La junta de Versant no se detiene ahí. Otros miembros de relevancia incluirán a Gerald Hassell, anterior CEO de BNY Mellon, Scott Mahoney, CEO de Peter Millar, y Maritza Montiel, ex vicepresidenta de Deloitte. Len Potter, conocido por ser el fundador de Wildcat Capital Management, también formará parte de este equipo estratégico que guiará la dirección de Versant en un mercado en constante evolución.
Versant albergará una serie de marcas reconocidas, incluyendo Oxygen, E!, SYFY y Golf Channel. Además, tendrá en su poder activos digitales como Fandango, Rotten Tomatoes, GolfNow y SportsEngine, todos generando un aproximado de $7 mil millones en ingresos anuales. Estos activos representan un paso importante de Comcast para adaptarse a la creciente demanda digital y a la presión que enfrentan los negocios de cable tradicionales.
Esta jugada de Comcast viene en un momento de transformación dentro de la industria, donde muchos conglomerados mediáticos buscan redefinir su enfoque. Un ejemplo notable es Warner Bros Discovery, que en junio anunció su intención de dividirse en dos empresas públicas, separando sus activos de streaming y estudios de sus redes de cable en declive. Es evidente que las grandes empresas están reajustando sus estrategias para enfrentar la era del streaming con mayor eficacia.