En el comercio asiático temprano de este lunes, los precios del petróleo han seguido su declive, mientras el crudo Brent descendió 52 centavos a $66.07 por barril y el West Texas Intermediate (WTI) de EE. UU. cayó 58 centavos a $63.30. Pero, ¿qué está detrás de esta bajada que ya superó el 4% la semana pasada? Como se explica en el informe original de Reuters, varios factores están en juego.
De aranceles y producción a la guerra en Ucrania
Varios eventos globales han contribuido a esta caída de precios. En primer lugar, los aranceles más altos impuestos por Estados Unidos sobre sus socios comerciales están impactando la economía global. Estos aranceles, que empezaron a regir el jueves, obligan a desviar cadenas de suministro y podrían provocar un aumento en la inflación. Además, el aumento en la producción de la OPEP añade presión a los precios del crudo.
La diplomacia petrolera de Trump
El presidente de EE. UU., Donald Trump, también juega un papel crucial en las dinámicas del mercado. Trump anunció su intención de reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, el 15 de agosto en Alaska. Este encuentro tiene como objetivo negociar el fin de la guerra en Ucrania. Además, Trump ya había establecido un plazo hasta el viernes pasado para que Rusia acordara la paz; de lo contrario, sus compradores de petróleo enfrentarían sanciones secundarias. También está presionando a India para que reduzca sus compras de petróleo ruso.
El papel de la inflación estadounidense
Por otro lado, la atención del mercado también está puesta en los datos de inflación de Estados Unidos, que se publicarán este martes. De acuerdo con Tony Sycamore, analista de mercado de IG, un índice de precios al consumidor (CPI) más débil de lo esperado podría fomentar la expectativa de recortes de tasas de interés más tempranos y profundos por parte de la Reserva Federal, lo cual podría estimular la demanda de petróleo. Sin embargo, un CPI más alto podría despertar temores de estanflación y retrasar estas expectativas.
Un cierre semanal sombrío
El cierre de la semana pasada no dejó un panorama alentador. El Brent registró una caída del 4.4% y el WTI del 5.1%. Estos descensos no solo reflejan las tensiones geopolíticas y económicas actuales, sino también un incierto futuro en el comportamiento del mercado petrolero global, que sigue observando de cerca los acontecimientos clave en el horizonte.