El índice S&P 500 ha visto un incremento del 8% en lo que va del año y se encuentra cerca de sus máximos históricos, cerrando el verano con fuerza. Según el informe original, Morgan Stanley ha planteado preocupaciones sobre la trayectoria de este crecimiento, señalando riesgos potenciales en el mercado laboral que podrían frenar este impulso.
Morgan Stanley ha sonado la alarma sobre el potencial de una desaceleración en el mercado laboral y el aumento del riesgo de estanflación. El reporte de empleos de julio reveló que la economía estadounidense agregó solo 73,000 empleos no agrícolas, una cifra que está por debajo de las 105,000 posiciones que se esperaban. Además, las revisiones de los dos meses previos fueron significativamente negativas, lo que alimenta aún más las preocupaciones.
Desempeño empresarial y desigualdad en el crecimiento
Durante la temporada de ganancias del segundo trimestre, las empresas han mostrado un sólido crecimiento, especialmente en el sector tecnológico. Aunque las ganancias del S&P 500 han superado o igualado el 80% de las expectativas, solo los sectores de tecnología de la información, servicios de comunicación y finanzas han registrado ganancias de dos dígitos. Este crecimiento desigual presenta un panorama mixto para el índice, ya que 493 empresas apenas han visto aumentos interanuales.
El impacto de las tensiones comerciales y la inflación
Las preocupaciones sobre la inflación y la posibilidad de estanflación continúan dominando las discusiones económicas. Aunque la economía ha mostrado resiliencia, el informe de Morgan Stanley advierte que este estado podría ser temporal. Las tarifas recíprocas más recientes han casi duplicado los niveles previos, estableciéndose en un 18%, lo cual podría afectar negativamente la economía a largo plazo.
El futuro incierto del mercado
Con una relación de ofertas de empleo por buscador de empleo cercana a 1:1, la encuesta JOLTs de la Oficina de Estadísticas Laborales indica una disminución en las ofertas de empleo a 7.44 millones a finales de junio. Además, una encuesta del Instituto de Gestión de Suministros muestra que el nuevo empleo se está contrayendo a niveles preocupantes. Estos son signos de una posible recesión inminente, ya que las señales de advertencia se multiplican. Los inversores deberán permanecer atentos mientras las tensiones comerciales y los riesgos económicos persisten.