Cuando Gabriela Febres llegó a Washington DC para estudiar ingeniería de audio en American University, jamás imaginó que se convertiría en una de las figuras más representativas de la gastronomía venezolana en la capital estadounidense. Nacida en Venezuela y criada en Miami, Gabriela creció rodeada de la calidez y los sabores de su cultura, pero al mudarse a DC, se encontró con una comunidad venezolana pequeña y dispersa. Esto, lejos de desanimarla, encendió en ella el deseo de crear un espacio que conectara a los venezolanos con sus raíces y, al mismo tiempo, presentara su cultura al mundo1.
Un puente entre culturas
En 2011, Gabriela conoció a Ali Arellano, un venezolano que ya tenía un pequeño negocio de distribución de productos centroamericanos en DC. Juntos vieron una oportunidad única: llevar los sabores de Venezuela a la diáspora que, aunque pequeña, estaba creciendo rápidamente. Comenzaron vendiendo quesos típicos como queso de mano y queso telita desde el refrigerador de su apartamento, utilizando Facebook y el boca a boca para llegar a sus primeros clientes. Así nació Antojitos de tu País, un negocio que hoy es un punto de referencia para los venezolanos en el área de DC, Maryland y Virginia (DMV).
Antojitos no es un restaurante convencional. Ubicado en un parque industrial, el lugar está diseñado para cumplir grandes pedidos de productos como tequeños, cachitos, hallacas y panes de jamón, especialmente durante las festividades navideñas. Es un rincón que, aunque discreto, se ha convertido en un santuario para quienes buscan un pedacito de Venezuela lejos de casa.
El nacimiento de Arepa Zone
El éxito de Antojitos de tu País fue solo el comienzo. En 2014, Gabriela y Ali lanzaron Arepa Zone, un food truck que rápidamente ganó popularidad entre estudiantes universitarios, trabajadores de organizaciones internacionales y locales curiosos por probar la comida venezolana. Al principio, Gabriela dedicaba hasta dos minutos a explicar qué era una arepa y por qué era tan especial. Para facilitar el proceso, implementaron un sistema de menú numerado al estilo de McDonald’s, pero pronto entendieron que educar al público sobre la cultura venezolana era parte de su misión.
Hoy, Arepa Zone cuenta con múltiples ubicaciones, incluyendo La Cosecha y Western Market, y es un símbolo de la gastronomía venezolana en la región. Además, su menú no solo atrae a venezolanos, sino también a personas de diversas culturas que se han convertido en fanáticos de platos como la reina pepiada y las cachapas.
Desafíos y triunfos de una mujer latina
El camino de Gabriela no ha estado exento de desafíos. Como mujer latina, enfrentó prejuicios y dificultades para ser tomada en serio como emprendedora. Sin embargo, su determinación la llevó a ganar una competencia de planes de negocio que le otorgó un año de renta gratuita en uno de los food halls más icónicos de DC. Este logro, junto con la apertura de su primer restaurante en la calle 14, marcó un antes y un después en su carrera. Gabriela no solo ha construido un negocio exitoso, sino que también se ha convertido en una embajadora de la cultura venezolana.
“Nos enorgullece ser embajadores de nuestra cultura y gastronomía. Es un rol que tomamos muy en serio”, afirmó en conversación con I Am An Immigrant.
Un mensaje para la comunidad
Para Gabriela, su trabajo no es solo un negocio, sino una forma de construir comunidad. “Nunca dejen de creer en sus sueños. Somos capaces de lograr grandes cosas, pero necesitamos unirnos como comunidad para ayudarnos a prosperar. ¡Mucho éxito!”, dice con entusiasmo.
La historia de Gabriela Febres es un testimonio del poder de la perseverancia, la identidad cultural y el trabajo duro. Desde vender quesos en un refrigerador hasta liderar un imperio gastronómico con múltiples ubicaciones, Gabriela ha demostrado que es posible construir un hogar lejos de casa a través de los sabores y tradiciones que nos definen. Su impacto no solo ha fortalecido la identidad de la diáspora venezolana en DC, sino que también ha abierto las puertas para que personas de todas las culturas descubran y celebren la riqueza de la gastronomía venezolana.