Mientras el presidente Trump asegura que el incremento en la presencia policial ha llenado los restaurantes y negocios locales de nuevo, los dueños de estos restaurantes no están de acuerdo.
“Yo, como un hombre de negocios, tengo muy claro que esto no es bueno para el negocio”, dijo Peter Schechter, cofundador del restaurante Immigrant Food. “La federalización que tenemos ahora en la ciudad tiene que parar”.
Desde que declaró su emergencia por crimen en Washington DC, el presidente Trump desplegó más de 2000 miembros de la guardia nacional en las calles del distrito, acompañados por el recién federalizado departamento de policía local. Con esta nueva y reforzada presencia policial, restaurantes locales dicen que han notado una disminución en la asistencia de sus clientes.
Immigrant Food, una cadena de comida multicultural con cuatro locales en el DMV, notó una caída en las reservas desde el inicio de la federalización. Schechter confirmó que además de pocas reservaciones, varios eventos en sus locales han pedido ser mudados del distrito o cancelados por completo.
“Con esta presencia más controladora y más represiva, hemos notado que ha bajado mucho la gente en los restaurantes esta semana”, dijo Peter Schechter.
Otros restaurantes, específicamente latinos, confirmaron estas observaciones. Arepazone, un restaurante venezolano típico del distrito, dijo que sus ventas bajaron 35% en la primera semana de la federalización, y que han visto sus ventas más bajas desde el pico de la pandemia durante la federalización.
Medios a través del DMV han publicado observaciones similares por parte de otros negocios. Dave Perruzza, el dueño de Pitchers en Adams Morgan, dijo que su bar perdió $7000 en una sola noche, en una entrevista con WUSA9.
El noticiero también fue el primero en reportar que los restaurantes de DC vieron una caída de 25% en sus reservaciones digitales en la primera semana bajo control federal, según datos de OpenTable. Durante el mismo período, las tasas nacionales de reservaciones digitales aumentaron 12%, destacando a DC como algo más que un “Summer Slump”.
Es importante notar que el comienzo de DC Restaurant Week subió las tasas de reservaciones digitales 29%, 14% más que la tasa nacional en su pico. Pero aunque la comunidad salió a apoyar a sus restaurantes favoritos en el distrito, los dueños de estos locales dicen que todavía no es suficiente.
“Todos los restaurantes de Washington están celebrando el Restaurant Week, pero esta semana no es como el Restaurant Week en otros años”, dijo Schechter.

Incluso con las estadísticas e historias compartidas por los propietarios de negocios locales, el presidente Trump insiste que los restaurantes están prosperando bajo su control federal. Dijo desde la Casa Blanca que “personas que no han salido a cenar en Washington DC en dos años están saliendo a cenar, y los restaurantes han estado más llenos en los últimos dos días de lo que lo habían estado en mucho tiempo”.
En su entrevista con El Tiempo Latino, Schechter destacó dos puntos de vista de sus consumidores alrededor de la federalización policial. Unos le han dicho que ver a la Guardia Nacional no les molesta, y que les da una gran sensación de protección.
Sin embargo, otros perciben los controles en las calles, las paradas de tráfico y las detenciones basadas solo en perfiles raciales como una presencia “completamente por azar” que Schechter piensa que desanima a las personas a visitar restaurantes.
Las personas que quieren salir a un restaurante “no quieren los problemas de estar con una sensación de presión”, dijo Schechter. “Es un tipo de presencia más controladora – no proteccionista, sino controladora”.
Schechter reafirmó que la misión de Immigrant Food, “una misión de abogar y celebrar todo lo que han hecho los inmigrantes”, es más importante hoy que nunca. “Este país es un país de inmigrantes, y si no tenemos inmigrantes este país va a cambiar para peor”, declaró.
Según Schechter, el estado polarizado del país ha hecho que se olvide el Sueño Americano, y que los únicos que creen todavía en el Sueño Americano son los inmigrantes. “Hay que defender los derechos de los inmigrantes como uno defiende también el Sueño Americano”, concluyó Schechter.