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Trump amenaza con aranceles a la Unión Europea por las multas impuestas a Google

Photo by Guillaume Périgois / Unsplash

El presidente Donald Trump ha encendido las alarmas al proponer una investigación que podría abrir las puertas a nuevos aranceles sobre la Unión Europea. Esta reacción llega en respuesta a las fuertes sanciones que la UE ha impuesto a empresas tecnológicas estadounidenses, entre ellas Google. Según el informe original, Trump no está dispuesto a permitir acciones que él califica de discriminatorias contra la ingeniosidad americana.

La UE ha multado a Google con más de $10 mil millones en la última década por cuestiones antimonopolio. Trump, mediante publicaciones en redes sociales, ha sido enfático al exigir que la UE detenga estas prácticas contra empresas estadounidenses de inmediato. La reciente multa de $3.5 mil millones impuesta a Google figura como catalizador de esta tensión creciente entre Washington y Bruselas.

Los comentarios de Trump surgieron apenas un día después de haber compartido una cena en la Casa Blanca con prominentes ejecutivos tecnológicos, entre ellos los líderes de Google, Sundar Pichai y Sergey Brin. Este encuentro ocurrió en un contexto donde, tan solo el mes pasado, se concretó un acuerdo comercial donde se mantuvieron aranceles del 15% para la mayoría de productos europeos, con tarifas más altas para automóviles.

Trump considera la activación de una investigación bajo la Sección 301, una herramienta que proporciona justificación legal para imponer impuestos de importación en respuesta a prácticas comerciales desleales. Esta no sería la primera vez que se usa esta estrategia, ya que fue esencial para imponer aranceles a China en 2018. Sin embargo, el proceso podría extenderse durante varios meses, lo que implica una seria evaluación de las futuras medidas por parte de los analistas.

Jacob Jensen, analista del American Action Forum, sugiere que la administración Trump está reestructurando su uso de autoridad legal para aranceles después de que una opción anterior fue desestimada por un tribunal federal. Esta cautela sugiere que Washington está evaluando cuidadosamente sus próximos pasos para sostener sus argumentos legales, en un claro intento de proteger el mercado estadounidense frente a las sanciones europeas.