El Departamento de Energía (DOE) publicó el 29 de agosto un informe elaborado por su Grupo de Trabajo sobre el Clima (GTC). Sin embargo, más de 85 científicos advirtieron en un análisis que los datos sobre dióxido de carbono y fenómenos extremos incluidos en el estudio son engañosos.
Los científicos enviaron sus observaciones al DOE, a la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y a la Academia Nacional para su revisión.
“Nuestra revisión revela que las afirmaciones clave del informe del DOE —incluidas las afirmaciones sobre la ausencia de tendencias en fenómenos meteorológicos extremos y los supuestos amplios beneficios del dióxido de carbono— son engañosas o fundamentalmente incorrectas”, se lee en la carta de los expertos.
Para los científicos, el error en las conclusiones del informe se debe a una manipulación de la evidencia: se destaca únicamente la información que respalda su postura, se magnifican las dudas existentes, se tergiversan citas de investigaciones revisadas por pares y se descarta una amplia base de estudios científicos consolidados durante décadas.
Detallan que en el informe se incurrió en el “cherry picking”, una práctica que consiste en seleccionar y presentar únicamente la información que respalda una postura particular, ignorando o minimizando la evidencia contraria. Esto puede conducir a conclusiones sesgadas y a una comprensión incompleta del tema.
En el informe del DOE nadie debería dudar del cambio climático
Para los más de 85 científicos, en este momento nadie debería dudar de que el cambio climático provocado por el ser humano es real y está generando impactos potencialmente peligrosos.
“La humanidad se encamina hacia un calentamiento geológicamente enorme. Nadie sabe cuáles serán los impactos socioeconómicos de este calentamiento”, enfatizaron.
En la carta, los científicos explican que la estrategia utilizada en el informe del DOE para cuestionar la evidencia científica se asemeja a las tácticas que la industria tabacalera empleó en el pasado para generar incertidumbre artificial.
“Aunque nuestra revisión no aborda explícitamente el hallazgo de peligro de 2009 de la EPA, el proceso de compilación de nuestra respuesta dejó una cosa en claro: en los 16 años transcurridos desde ese hallazgo, la evidencia del cambio climático causado por los humanos y sus amenazas a la salud y el bienestar públicos solo se ha fortalecido”, resaltaron.
Finalmente, recomiendan que en futuros informes el DOE utilice las evaluaciones confirmadas del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático y de la Evaluación Climática Nacional, ya que ofrecen una visión más precisa de la comprensión científica de la crisis climática.