De la Riviera del Medio Oriente a la bonanza inmobiliaria: parece que todos alucinan con reconstruir Gaza. Pero, ¿y la crisis humanitaria? ¿y los palestinos? ¿y las personas que están sufriendo la guerra? ¿y quienes han sido desplazados de manera forzada?
Las palabras del ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, hicieron ruido esta semana al describir la destrucción en Gaza como una oportunidad para una bonanza inmobiliaria. En un evento de bienes raíces en Tel Aviv, afirmó que ya negocia con Estados Unidos para reconstruir el enclave con fines comerciales, una idea que recuerda la visión de Donald Trump cuando habló de convertir Gaza en la Riviera del Medio Oriente.
Los comentarios de Smotrich llegan cuando continúan los bombardeos y los deplazamientos masivos de los palestinos, y plantean un choque entre la narrativa de “renovación” y la realidad humanitaria.
SE PASÓ DE LA RAYA
Una nueva encuesta de AP-NORC mostró que cada vez más estadounidenses creen que Israel “se ha pasado” en su ofensiva sobre Gaza. Aproximadamente la mitad de los adultos en Estados Unidos ve ahora la respuesta militar israelí como excesiva, frente al 40% que lo pensaba en noviembre de 2023. Y la percepción de que Israel ha ido demasiado lejos no es solo de un lado: se volvió bipartidista, incluso entre republicanos.
- La línea entre reconstrucción y despojo se vuelve más difusa que nunca. En un foro de bienes raíces en Tel Aviv, el ministro israelí dijo que existe “un plan de negocios” en marcha con Estados Unidos para convertir la devastación de Gaza en una “bonanza inmobiliaria”. Según él, la “fase de demolición” ya está hecha y ahora viene la “fase de construcción”, donde Israel y sus socios podrían beneficiarse de la comercialización de la tierra.
- “Hay un plan de negocios elaborado por los profesionales más profesionales que existen y que está sobre la mesa del presidente Trump, y cómo esto se convierte en una bonanza inmobiliaria”, declaró, según The Associated Press. Aseguró que inició conversaciones con los estadunidenses. “Porque también exijo que hayamos pagado mucho dinero por esta guerra, así que necesitamos dividir cómo obtendremos un porcentaje de la comercialización de tierras en Gaza”.
- Mientras Smotrich habla de reconstrucción, las fuerzas israelíes intensifican una operación terrestre sobre Gaza City, el corazón del enclave, con miles de civiles desplazándose hacia el sur. Según cifras locales avaladas por la ONU, más de 65.000 personas han muerto y el 90% de la población está desplazada. Israel dice que busca destruir a Hamás, pero el costo humanitario y político aumenta cada día.
- Implicaciones legales y políticas. Expertos en derecho internacional, como Adil Haque de Rutgers, advierten que cualquier plan para asumir control permanente de Gaza violaría normas básicas del derecho de guerra. Aunque no hay detalles oficiales sobre la participación de Washington, los comentarios de Smotrich y los ecos del plan de Trump han intensificado el debate sobre si la reconstrucción es un esfuerzo humanitario o un negocio en territorio ocupado.
ENTRE EL PAPEL Y LA LEGALIDAD
Las declaraciones de Smotrich abren un debate incómodo (pero necesario) sobre el futuro de Gaza. ¿Es posible reconstruir después de la guerra sin convertir el sufrimiento en un negocio? Para algunos es una oportunidad de desarrollo, para otros un despojo encubierto. Por ahora, entre las bombas y las negociaciones, la reconstrucción sigue siendo un plan en papel y una disputa abierta sobre su legitimidad.