La última semana del año todavía guarda regalos para quienes miran al cielo. Aún se pueden observar fases lunares clave, planetas brillantes y constelaciones invernales que dominan la noche. Abrígate, aléjate de las luces y aprovecha estos últimos espectáculos celestes de 2025.
La Luna vuelve a crecer antes de Año Nuevo
El evento lunar más destacado de los últimos días del año llega el 27 de diciembre, cuando la Luna alcanza su fase de cuarto creciente. Esta fase es ideal para observar relieves, cráteres y montañas lunares con binoculares o telescopio, gracias a las sombras marcadas sobre la superficie. Además, al no estar completamente iluminada, permite combinar la observación lunar con estrellas y planetas cercanos.
Las constelaciones de invierno dominan el cielo nocturno
A partir del anochecer, las constelaciones más brillantes del invierno ya se encuentran bien posicionadas en el cielo del este y sureste. Para finales de diciembre, estos grupos estelares se pueden ver claramente desde las 8:30 pm, ofreciendo un espectáculo temprano incluso para quienes no trasnochan. Este cambio ocurre porque la Tierra avanza alrededor del Sol a razón de aproximadamente un grado por día, mientras completa una rotación cada 23 horas y 56 minutos.
Aldebarán y las Pléyades: un clásico para cerrar el año
Durante estas noches finales de diciembre, sigue siendo fácil localizar a Aldebarán, la estrella naranja brillante conocida como “el ojo ardiente de Tauro”. Justo encima, el cúmulo estelar de las Pléyades, también llamado “las Siete Hermanas”, ofrece una de las vistas más bellas del cielo invernal. Con binoculares, el grupo revela más estrellas y, en fotografías de larga exposición, incluso la nube de polvo interestelar que lo rodea.
Planetas visibles en la recta final de 2025
Aunque algunos planetas ya se pierden en el resplandor solar, otros siguen destacando en las noches posteriores a Navidad. Júpiter aparece brillante en el noreste poco después del anochecer, mientras que Saturno se mantiene alto en el suroeste, ofreciendo una vista espectacular de sus anillos incluso con telescopios modestos. Urano y Neptuno también están presentes, aunque requieren binoculares potentes o telescopio para apreciarse mejor.
La última semana del año todavía tiene mucho que ofrecer a quienes disfrutan del cielo nocturno. Entre fases lunares ideales para la observación, planetas brillando con fuerza y constelaciones invernales en su mejor momento, estos días finales de diciembre son una invitación perfecta para hacer una pausa, salir al frío y despedir el 2025 con la mirada puesta en las estrellas.