La magistrada de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua Ellen Joy Lewin Downs habla sobre la "I Cumbre Latinoamericana de Lideresas Afrodescendientes de las Américas".



EFE

La magistrada de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua Ellen Joy Lewin Downs habla sobre la "I Cumbre Latinoamericana de Lideresas Afrodescendientes de las Américas".

Managua, 27 jun (ACAN-EFE).- Las mujeres latinoamericanas afrodescendientes se reunieron por primera vez en una cumbre, en Nicaragua, para definir una estrategia que combata la exclusión y marginación de la que, alegan, son víctimas.

La llamada Primera Cumbre de Lideresas Afrodescendientes de las Américas fue inaugurada anoche en un hotel de Managua, con la presencia de más de 250 mujeres de 22 países en busca de mecanismos a favor de sus derechos y de que sus futuras generaciones tengan una vida digna, en igualdad de condiciones que el resto de las personas.

“Estamos sentando un precedente porque es la primera vez que hay una cumbre de mujeres negras”, expresó el enlace en Guatemala de la Red de Mujeres Afrolatinoamericanas, Afrocaribeñas y de la Diáspora, Gloria Núñez.

La Red mostró como prioridades en su agenda combatir el racismo, el rescate y reconocimiento de su patrimonio, la atención a la salud integral, sexual y reproductiva, no más violencia hacia las mujeres afrodescendientes, visibilización en censos y estadísticas nacionales, acceso a recursos naturales y económicos, y seguridad y soberanía alimentaria.

Para ello, aprobaron por consenso una plataforma política, que servirá de base en el accionar de su lucha y demandas a la sociedad y los Estados.

Con esta plataforma, la Red de Mujeres Afro busca avanzar en el cumplimiento de sus derechos en el marco del Decenio Internacional de la Población Afrodescendiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU), comprendido entre 2015 y 2024, el cual consideran “la oportunidad histórica para crear mecanismos de diálogo y concertación política”.

Además, al culminar el Decenio Internacional de la Población Afrodescendiente esperan que, entre otros asuntos, haya una reducción del nivel de pobreza y contención del avance del analfabetismo de los pueblos afrodescendientes.

Las mujeres afrodescendientes latinoamericanas buscan cambiar la realidad de la mujer de todo el continente americano, donde aseguran hay exclusión, marginación, grandes brechas de desigualdad y falta de empleo.

En la cumbre, la mujeres afrodescendientes acordaron, entre otros puntos, demandar, exigir e incidir en los Estados y Gobiernos de la región que se integren las propuestas que contenga la plataforma política.

Asimismo, se comprometieron a coordinar con la cooperación internacional para que fomenten la autonomía económica de las mujeres afrodescendientes mediante políticas, programas y proyectos de desarrollo que promuevan su protagonismo político.

También acordaron crear un observatorio en los 22 países donde la Red tiene presencia de seguimiento a la plataforma política aprobada en la cumbre, y realizar dentro de cinco años la segunda cumbre para ver lo avanzado en los objetivos de la plataforma política.

La coordinadora general de la Red, Dorotea Wilson, sostuvo que en todos los países de la región hay marcos legales a favor de los derechos de las mujeres, sin embargo no hay asignación de recursos para su implementación.

“Los Estados deben conocer las brechas existentes y asumir las demandas específicas de las mujeres”, apuntó Wilson.

Gisela Arandia Covarrubias, enlace en Cuba de la Red, sostuvo que el racismo, la discriminación y la violencia hacia la mujer son fenómenos globales que la sociedad no quiere asumir, porque siempre son procesos dolorosos que implican conflictos y la gente prefiere evadirlos.

Opinó que la deconstrucción del racismo es un proceso muy complejo y requiere de estrategias minuciosas.

Asimismo, explicó que en el caso de Cuba, con logros sociales “extraordinarios” y donde “más del 66 % de los profesionales cubanos son mujeres”, el racismo todavía sigue siendo “un tema que no forma parte del debate público”.

La activista cubana sostuvo que en la práctica todavía existe “ese mito de que no hay racismo”.

Por otro lado, destacó, entre los grandes logros de esta cumbre, la presencia de mujeres jóvenes afrodescencientes.

Además, indicó que una de las virtudes de la Red es que ha sabido diseñar estrategias.

Hay una metodología de trabajo que permite que las ideas se elaboren desde abajo y además tengan un consenso, señaló.

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