En su primer discurso como secretaria del Tesoro, Janet Yellen abogó por una tasa impositiva mínima global, algo que se busca impulsar desde la administración Biden en un plan de infraestructura financiado por un aumento de los impuestos a corporaciones.
The Hill citó a la funcionaria, quien aseguró en un evento virtual organizado por el Consejo de Asuntos Globales que “juntos podemos utilizar un impuesto mínimo global para asegurarnos de que la economía global prospere sobre la base de un campo de juego más nivelado en la tributación de las corporaciones multinacionales y estimule la innovación, el crecimiento y la prosperidad”.
La semana pasada, el presidente Joe Biden propuso una serie de cambios en los impuestos corporativos, los cuales apuntarían a la recaudación de más de $2 billones a lo largo de 15 años y así cubrir las inversiones en infraestructura.
Dicha planificación elevaría del 21% al 28% la tasa impositiva.
“La competitividad es más que cómo las empresas con sede en Estados Unidos se comportan frente a otras empresas en licitaciones globales de fusiones y adquisiciones”, indicó este lunes la secretaria. “Se trata de asegurarse de que los gobiernos tengan sistemas fiscales estables que generen ingresos suficientes para invertir en bienes públicos esenciales y responder a las crisis, y que todos los ciudadanos compartan de manera justa la carga de financiar al gobierno”.
Defensa de la acción
La semana pasada desde la Cámara de Representantes, la secretaria del Tesoro defendió la necesidad de aumentar impuestos, pero aseguró que la administración Biden no haría daño a los pequeños comerciantes o a estadounidenses de clase media o baja.
“Debemos aumentar los impuestos de forma justa para poder sufragar los gastos que esta economía necesita para ser productiva y competitiva”, respondió Yellen en respuesta a preguntas de la Representante de Missouri, Ann Wagner.
Yellen añadió: “Un plan conformado por inversión en personas e inversión en infraestructura, ayudará a crear empleos en la economía estadounidense, y los cambios en la estructura impositiva ayudarán a costear esos programas”.
Específicamente, los asesores económicos de Joe Biden están evaluando si presionar por una serie de aumentos de impuestos que propuso durante la campaña contra Donald Trump en el 2020, incluyendo incrementos de la tasa corporativa del 21 al 28 por ciento, del máximo para contribuyentes de mayores ingresos y del impuesto a las ganancias de capital para personas consideradas millonarias.