La incidencia del COVID-19 en niños se hace cada vez más fuerte en Estados Unidos, donde la semana pasada, según datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), alrededor de mil 600 menos fueron hospitalizados en todo el país, la mayor cifra en un lapso de siete días.
¿Por qué es importante?: Pese a que el brote no tiene el mismo impacto sobre los niños en comparación con los adultos, la Asociación de Hospitales de Niños de Estados Unidos predice que las cosas podrían empeorar a medida que los pequeños regresan a las aulas de clases.
- Estados como Arkansas, Tennessee y Louisiana se acercan a su totalidad de ocupación respecto a las camas de hospitalización para niños mientras los médicos lidian con numerosos casos de virus respiratorios en los pacientes.
- El aumento de casos de COVID-19 entre niños fue de 27% respecto a la semana anterior, agregaron los CDC en su informe respecto al efecto del virus entre menores de edad.
El dato: El 60% de los participantes en una encuesta de la Kaiser Family Foundation se opuso a la exigencia de vacunas para los niños que asistan a las escuelas. Además, el 70% de los padres seguidores del Partido Republicano indicaron no estar de acuerdo con los mandatos de cubre bocas.
- Los CDC indicaron que las muertes pediátricas por complicaciones vinculadas a la pandemia del COVID-19 son menores a una décima parte del 1% del total de fallecidos en todo el país.
- La semana pasada, la Academia Estadounidense de Pediatría pidió a la FDA actuar más rápido para permitir la vacunación en niños menores de 11 años.
Fuente principal de la noticia: POLITICO