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Ni TV ni redes sociales: el GOP y demócratas están usando el e-mail para propagar desinformación

Diseño: Gabriela Navarro

En la era del factchecking, el discurso político está cada vez más bajo escrutinio de los verificadores de datos. Los pronunciamientos hechos por legisladores en redes sociales y medios tradicionales son objeto constante de análisis, y las declaraciones falsas son desmontables en cuestión de minutos.

Sin embargo, hay un frente al cual todavía no han llegado: los correos electrónicos. The New York Times se suscribió desde agosto a las listas de distribución de 390 senadores y congresistas que pelearán por la reelección en 2022. Luego de leer más de 2.500 emails de estas campañas, constataron que las exageraciones cuelan más fácil en este medio no vigilado.

¿Cuál fue el balance?

  • Tanto republicanos como demócratas usaron “montones de hipérboles”: Un republicano, por ejemplo, declaró que los demócratas querían establecer un “Estado socialista de partido único”, mientras que un demócrata sugirió que la investigación del partido del 6 de enero estaba en riesgo inminente porque el GOP “podría obligar a que finalice antes de tiempo”.
  • Los republicanos incluyeron desinformación más seguido que los demócratas: aproximadamente el 15% de los mensajes de legisladores del GOP contienen desinformación, en comparación con aproximadamente el 2% de los demócratas. Además, varios republicanos suelen difundir las mismas afirmaciones falsas, mientras que los demócratas rara vez se repiten entre sí.
  • Por lo menos ocho congresistas republicanos enviaron correos de recaudación de fondos que contenían una distorsión de un posible acuerdo con migrantes separados de sus familias durante la administración Trump. Uno de ellos, el senador John Kennedy (Luisiana), afirmó falsamente que el presidente Biden estaba “dando a cada inmigrante ilegal que llega a nuestro país $450.000”.
  • El número relativamente pequeño de declaraciones falsas de los demócratas se refería principalmente al aborto. Un correo electrónico de la representante Carolyn Maloney (New York) decía que la ley de Mississippi era "casi idéntica a la de Texas, que prohíbe los abortos después de 6 semanas”. En realidad, esta disposición prohibe los abortos luego de las 15 semanas y no incluye el mecanismo de denuncias ciudadanas.

¿Por qué es importante? Según el Times, los políticos “han exagerado y disfrazado desde tiempos inmemoriales”, incluso en sus envíos por email. Pero actualmente, el volumen y el alcance de estas afirmaciones falsas ha aumentado.

  • El correo electrónico es una herramienta crucial en la recaudación de fondos políticos por sus bajos costos y alta eficacia. Los partidarios son bombardeados, a veces a diario, con mensajes provocativos, ya que los estrategas saben que el enojo motiva a los votantes.
  • En muchos casos, los candidatos utilizaron información errónea que inducía a la ira directamente en sus solicitudes de donación. Por ejemplo, después de su afirmación falsa sobre los pagos a los inmigrantes, el senador Kennedy incluyó un enlace con la etiqueta “¡ENVÍA $500 PARA DETENER LOS PAGOS ILEGALES!”.
  • Las personas detrás de las campañas se han “dado cuenta de que cuanto más extrema es la afirmación, mejor es la respuesta” con respecto a las donaciones, dijo Frank Luntz, un encuestador republicano. Agregó que esto “solo contribuye a la perversión de nuestro proceso democrático”.

Dificultades para verificar. Combatir la información errónea en los correos electrónicos es difícil tanto por la naturaleza privada del medio como porque su público objetivo está predispuesto a creerla.

  • Emily Thorson, una científica política de Syracuse, señaló que el hecho de que los destinatarios probablemente ya fueran partidarios acérrimos reduce las posibilidades de que los datos falsos lleguen a las personas cuyas opiniones sean flexibles.
  • Thorson dijo que lo que más le preocupaba era que, a diferencia de gran parte de la desinformación en las redes sociales, estos correos provienen de personas con autoridad y se difunden repetidamente.
  • Por su parte, Luntz aseguró que dirige a varios grupos de votantes de forma regular y estas personas tienden a aceptar la desinformación de forma poco crítica: “Lo ven como un contexto, lo ven como información; no necesariamente lo ven como una recaudación de fondos, aunque eso es lo que es”.

Con información de The New York Times