El objetivo es expandir cuidado de salud cercano, asequible y de calidad para los residentes de Washington, DC, sin importar que no puedan pagar. Es lo que pretende la alianza entre Unity Health Care, y Providence, parte de “Ascension Health System”.
Este acuerdo une a dos instituciones hospitalarias: el mayor centro de salud en el Distrito aprobado a nivel federal—que sirve a más de 101.000 pacientes al año— y Providence, el mayor sistema de cuidado de salud católico del país.
Las dos instituciones mantendrán su autonomía, pero mantendrán en común su visión de asistir a las comunidades de bajos recursos del Distrito de Columbia.
Se trata, dicen los responsables, de llevar la atención primaria y los doctores especializados donde los residentes de DC lo necesitan, en sus vecindarios.
La alianza pretende además reducir costos, evitando la redundancia de exámenes y el acceso a la información de los pacientes.
Otra de las ventajas será que ambas instituciones podrán desarrollar programas educativos conjuntos para promocionar nuevos modelos de atención al paciente y servicios para gestionar enfermedades crónicas.
“Las visitas a las salas de emergencia son caras, consumen mucho tiempo y con frecuencia son evitables”, dijo Amy Freeman, presidenta y CEO de Providence.
“Por fortuna, chequeos regulares pueden ayudar a manejar condiciones crónicas. Al expandir el acceso a doctores de Providence en Unity Health Care, podemos ayudar a los pacientes a tratar mejor sus enfermedades, mejorar los resultados y aliviar los costos evitando viajes innecesarios a las salas de emergencia”.
Por su parte, Vincent Keane, presidente y CEO de Unity Health Care reiteró que se necesita reducir los costos para los residentes de DC. y mejorar resultados: “esta alianza entre Unity y Providence conseguirá ambos objetivos”, dijo Keane.