Washington, DC.- En el décimo quinto día de ayuno frente a la Casa Blanca, pidiendo al presidente Obama tomar una acción migratoria, la activista Susana Sandoval, se desmayó. “La llevaron al hospital y le dieron suero, pero no quiso levantar el ayuno”, expresó a El Tiempo Latino el activista Francisco Díaz, quien se unió a las madres en la huelga de hambre el mismo día que empezó.
Las mujeres, que pertenecen al movimiento DREAMers’ Moms, dicen que no levantarán el ayuno hasta que el presidente Barack Obama anuncie una acción ejecutiva que daría un alivio a millones de indocumentados.
Se espera que el cualquier momento de esta semana o la próxima, el presidente haga uso de su poder ejecutivo y decrete una medida que aliviaría a millones de indocumentados.
Aunque no hay detalles del timpo de acción se espera que ésta permita la legalización de unos 5 millones de inmigrantes sin papeles.
Obama actuaría pese a las advertencias del futuro Congreso,dominado por los republicanos.
