Las primeras reacciones en Nueva York sobre el anuncio de que Amazon dividirá en dos grandes oficinas su sede principal, con la Gran Manzana como una de estas, no fueron las más esperadas.
Este miércoles, una protesta organizada por habitantes de Queens, distrito en el que estará la nueva estructura del gigante, desnudó una serie de mínimas diferencias existentes entre demócratas.
Los indicios se asomaron la semana pasada, cuando diversos medios de comunicación locales dieron detalles sobre lo que sería la supuesta instalación de la nueva sede en Nueva York, así como en la capital estadounidense, Washington.
De acuerdo con la agencia de noticias EFE, fueron varios los representantes demócratas que rechazaron dicha noticia al asegurar que esto traería problemas a la zona pues representaría un aumento en el valor de las viviendas.
“Amazon es una compañía de mil millones de dólares. La idea de que recibirá cientos de millones de dólares en beneficios fiscales al mismo tiempo que nuestro metro se desmorona y que nuestras comunidades necesitan más inversiones, no menos, es algo que preocupa extremadamente a quienes residen aquí”, escribió en Twitter la congresista Alexandria Ocasio-Cortez.
Las palabras contrastan con lo dicho por el gobernador Bill de Blasio, quien aseguró que el arribo de Amazon le brinda a la Gran Manzana consolidarse como un “gran centro tecnológico internacional”.