El gobernador de Virginia, Ralph Northam, tenía programado reunirse con su gabinete el lunes a las 9 am y luego con otros funcionarios de la administración mientras él considera su renuncia, luego de dos días de controversia sobre una foto racista en su anuario de la escuela de medicina.
Los 140 miembros de la Asamblea General regresaron a Richmond para la sesión legislativa en curso, tratando de concentrarse en los plazos para aprobar un presupuesto estatal en un ambiente de incertidumbre y dramatismo.
Recordemos que el domingo por la noche, el gobernador se reunió con altos funcionarios afrodescendientes para discutir su futuro, luego de dos días de desafío contra el clamor nacional de que debía renunciar.
Personas familiarizadas con esa reunión aseguraron que Northam no había tomado aún una decisión.
No estaba claro quién estaba presente, pero el grupo no incluyó al Vicegobernador Justin Fairfax, que se convertiría en gobernador si Northam renunciara.
La convocatoria a la reunión del domingo por la noche fue una clara señal del esfuerzo de Northam para evaluar el apoyo dentro de la administración, mientras evalúa sus opciones. Aunque se comprometió el sábado a mantenerse firme, también dijo que reconsideraría si pensara que ya no podría ser efectivo.
De acuerdo con personas cercanas al gobernador, Northam pasó gran parte del domingo en su hogar en la costa este, mientras los confidentes dieron consejos contradictorios sobre si debía renunciar o continuar luchando en el gobierno para limpiar su nombre.
Algunos de sus aliados más fuertes en el Partido Demócrata de Virginia llevaron sus pedidos de renuncia a las ondas nacionales el domingo, argumentando que el descubrimiento de una foto racista en su página del anuario de la escuela de medicina de 1984, lo había hecho incapaz de continuar liderando el estado.
Con información de The Washington Post
