El obelisco que se exhibe en el área monumental de Washington, pieza en homenaje al primer presidente de Estados Unidos, fue abierto al público tras tres años de cierre para ser parte de una reparación en sus entrañas.
Este mismo jueves, el monumento recibió a sus primeros visitantes.
Los primeros en acercarse a la obra fueron estudiantes de unos de 10 de edad quienes junto a la primera dama norteamericana, Melania Trump, cortaron un lazo que se tradujo como el regreso al público de un símbolo icónico de la capital de los Estados Unidos.
Tras ellos, la pareja del presidente Donald Trump subió en ascensor hasta la cima del monumento, calculada como la construcción más alta de la capital, de 169 metros.
Además del mencionado grupo de escolares y la primera dama, una serie de turistas dijo presente en el sitio para visitar la famosa pieza arquitectónica. Las visitas fueron tal que a primera hora se agotaron los boletos para subir al obelisco.
El peso histórico del monumento es incalculable.
Así lo confirmó Fran Dennison, habitante de Texas, quien fue junto a su nieto a la capital para visitar el lugar. Ahí, estuvo desde primeras horas de este 19 de septiembre con la intención de poder ver el enorme homenaje para el expresidente Washington.
“He venido por mi nieto, creo que es una gran experiencia para él, subir ahí arriba y ver la cumbre del monumento de Washington”, declaró a la agencia de noticias. “Estoy deseando ver su expresión de alegría y de júbilo cuando lleguemos arriba y mire por la ventana”.
Las obras para armar la pieza iniciaron en 1848 y terminaron en 1884, un tributo que recibe anualmente a unos 500.000 visitantes.
