Tomás Guevara – ETL
CEREMONIA. El templo evangélico Tiempo de Gracia acogió a decenas de familiares, amigos y seguidores del famoso Carlos Osorio. | FOTO: Tomás Guevara – ETL |
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PALABRAS. Entre las palabras de agradecimiento no faltaron las de quienes fueron inspirados por el locutor para seguir sus pasos. | FOTO: Tomás Guevara – ETL |

TOMÁS GUEVARA – ETL
DESPEDIDA. En los honores fúnebres a don Carlos Osorio, se unieron decenas de representantes de la comunidad deportiva. | FOTO: Tomás Guevara – ETL |
El templo evangélico Tiempo de Gracia ubicado en la avenida New Hampshire de Silver Spring, Maryland acogió a decenas de familiares, amigos y seguidores del famoso Carlos “Escopeta” Osorio, una legendaria voz del periodismo deportivo salvadoreño que marcó huella en esta región desde los micrófonos de Radio América.
La estación de radio dirigida por el empresario Alejandro Carrasco lo reclutó para dirigir su departamento de deportes en el año 2006, y desde entonces la voz del reconocido locutor, que se inició en el periodismo deportivo en 1963, se convirtió en la vigorosa presencia que narraba los partidos y las tertulias sobre deportes en esta región para los aficionados hispanos.
En los honores fúnebres a don Carlos Alberto Osorio, quien falleció el pasado 22 de octubre a la edad de 80 años, se unieron decenas de representantes de la comunidad deportiva, en la sede del templo cristiano donde por años se ha congregado su familia.
El empresario Alejandro Carrasco, narró luego del servicio religioso dirigido por el pastor de la iglesia, que traer a “Escopeta” Osorio a esta región no fue tarea fácil, pues tuvo que hacer tres viajes continuos a El Salvador solo para convencerlo de dejar el país centroamericano y mudarse a esta región.
Al final la oferta fue aceptada y el locutor dejó la estación YSKL en San Salvador y aceptó venirse al DMV. Carrasco recordó entre risas que aquello le granjeó enemistades en la estación centroamericana, “pero al final entendieron que don Carlos había tomado la mejor decisión”.
Esa decisión fue mudarse al área metropolitana de DC donde la comunidad salvadoreña se impulsaba como la primera minoría de inmigrantes latinos, y donde sin duda Carlos “Escopeta” Osorio vino a abonar en la calidad del periodismo deportivo, con su amplitud de conocimientos, no solo de fútbol, sino de otras disciplinas, recordó Carrasco.
Entre las palabras de agradecimiento no faltaron las de quienes fueron inspirados por el locutor para seguir sus pasos. Tal es el caso del reconocido conductor de periodismo deportivo, Oscar Burgos, quien creció escuchando la voz de “Escopeta” Osorio en su natal Guatemala, puesto que su pueblo está a 15 minutos de la frontera del vecino país y la señal de radio y televisión que recibían era la salvadoreña, comentó.
Burgos destacó la humildad del fallecido, que cuando lo conoció en 1978 en el Estadio de la Flor Blanca (hoy Mágico González), en San Salvador, durante un partido, le sorprendió que una figura ya conocida en el mundo deportivo, tuviera tanta sencillez de darle consejos a un chico que quería seguir sus pasos.
“Aquí estamos, con bastante millaje también, pero muy agradecido a la vida de haber conocido y compartido con una persona tan noble y comprometida con su profesión y lo mejor, haberlo tenido aquí en la región los últimos 14 años de su carrera de casi 60 años, que no es poco”, acotó Burgos.
Elías Polío, el artífice de los partidos de la Selecta con otros seleccionados latinoamericanos en el estadio Robert F. Kennedy de DC, también expresó las condolencias públicas a la familia del locutor, su gran amigo, del que pudo despedirse apenas un par de horas antes de su fallecimiento y a quien echará de menos por sus valiosos consejos en la gestión de partidos.
Polío recordó que la fraternal relación con Carlos “Escopeta” Osorio inició muchos años antes de que Carlos se trasladara a esta región y cuando todavía no existía el proyecto de invitar a selecciones para realizar partidos amistosos internacionales en esta región. Estos juegos año tras año llenan las gradas del estadio, a manera de competencia entre los hinchas de los países latinoamericanos en el área del DMV.
“Hoy estamos aquí para despedir a un gran amigo, que significa una gran pérdida para la comunidad salvadoreña, pero también para los latinoamericanos que le conocieron en todos estos años de trabajo aquí en el área metropolitana de Washington, y de quienes también se ganó el respeto y admiración, algo que nos quedó comprobado cuando le hicimos un homenaje en un partido de la Selección salvadoreña contra la del Perú, yo espero que en El Salvador muy pronto se le rinda un homenaje como lo merece”, comentó Elías Polío.
El periodista Mario Sol, lamenta que en pocos meses la salud de Osorio, que batalló con un cáncer desde el año 2015, con altibajos y tratamientos, se deterioró y no dio tiempo de hacer un registro testimonial de su larga carrera. Sobre todo por empeorar su situación en este contexto de la pandemia y todas las restricciones que impone.
Alejandro Carrasco remarca que la trayectoria del reconocido locutor migueleño es una muestra de perseverancia, pasión por su trabajo, entrega a su familia y a su comunidad de la audiencia deportiva que ha mostrado también su solidaridad en todos estos días de duelo para la radio.
“57 años haciendo radio, 3 espigas doradas, dos micrófonos de oro… Carlos Alberto Osorio nos enseñó mucho por su amplitud y actualización de conocimientos deportivos, no solo fútbol, sino de otros de deportes que narraba con profundo conocimiento”, puntualizó Carrasco quien mantuvo en la plantilla de su estación a Osorio hasta el final.
Por parte de la familia, su hija Nidia Osorio, describió al padre, esposo y abuelo que les enseñó el camino de la rectitud en todo momento, y que sabía decir las cosas de manera directa, y cuando eran muy incomodas, tenía a su emisaria inmediata, la esposa para dar los veredictos.
“Hasta tenía una risita, que uno ya se la conocía cuando algo no le parecía y si no nos decía las cosas directamente se las encomendaba a mi mamá para que lo hiciera”, comentó su hija quien agradeció todas las muestras de cariño y respeto que han recibido durante estos días de duelo, condolencias que han llegado de diferentes sectores de la comunidad hispana en la región y de la gran familia extendida en El Salvador.
Antes de llegar a Washington Carlos “Escopeta” Osorio laboró durante décadas como director de deportes de cadenas radiales como YSKL y Cadena de Oro. Osorio inició en los menesteres radiales en 1963 para la estación YSU. En 1965 comenzó a formar parte del circuito YSR haciendo dupla con otra leyenda de las transmisiones de fútbol en El Salvador, el ya fallecido, Raúl Ernesto “Pato” Alfaro.
Desde 2006, cuando arribó a esta región el laureado locutor dirigió el departamento de deportes de Radio América y se convirtió en la voz en español del D.C. United. Entre sus grandes aportes desde el micrófono en Washington se destaca el dar a conocer la historia del fútbol salvadoreño en Estados Unidos.