La lucha por aumentar el salario mínimo ha sido librada por muchos años en los EEUU. Foto: The All-Nite Images from NY, NY, USA - Fight for $15 on 4/15, CC BY-SA 2.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=44970719.
COMPARTE

 (c) 2021, The Washington Post ·Tony Romm

WASHINGTON – El presidente Joe Biden y los demócratas en el Congreso sufrieron otro revés en su esfuerzo por incrementar los salarios de los estadounidenses, después de que el martes el Senado no aprobara un proyecto de ley cuyos promotores aseguran tiene como objetivo que las mujeres reciban salarios por su trabajo similares a los de sus contrapartes masculinos.

Incluso con el respaldo público de Biden – y apoyo prácticamente total Demócrata a comenzar el debate sobre la medida – los líderes del partido no pudieron superar la oposición republicana para avanzar una de las promesas centrales que hicieron en el curso de la campaña presidencial de 2020.

La derrota había sido esperada dada la historia del partido republicano de rechazo a la medida, conocida como la Ley del Salario Justo (Paycheck Fairness Act), que los Demócratas han tratado de adoptar de alguna forma desde hace casi 30 años. De cara a la votación, los Demócratas dijeron que tratarían de avanzar la medida de todas formas con el objetivo de “mostrar a las personas que estamos tratando, y éste es el obstáculo que estamos enfrentando”, dijo la Sen. Patty Murray, D-Washington, la promotora en jefe de la medida en la cámara.

Pero la derrota en la votación molestó a los Demócratas, quienes inicialmente esperaban que sus mayorías en el congreso, aunque mínimas, pudieran ayudarlos a lograr una de sus prioridades económicas más importantes. Sumando a la rivalidad política, ésta fue la segunda vez en menos de cuatro meses que el senado rechaza una propuesta amplia destinada a mejorar el salario de los trabajadores, teniendo en aquel momento los Demócratas que retirar su propuesta de elevar el salario mínimo federal.

Reconociendo las implicaciones políticas de esto para su propio partido, el martes los Demócratas dijeron que no abandonarían su lucha para mejorar los salarios de los trabajadores y que están explorando activamente opciones legislativas adicionales en los meses por venir.

“Habrá problemas importantes en el 2022, y había problemas importantes en 2020” dijo la Rep. Pramila Jayapal, D-Washington, líder del Caucus Progresista del Congreso.  “Yo realmente creo que si no completamos este trabajo en toda su extensión... no sólo estará en riesgo el legado del presidente, pero también estará en riesgo nuestra mayoría en el congreso”.

A pesar de la derrota, este más reciente esfuerzo de los Demócratas por reducir la brecha salarial entre géneros también les permitió reflexionar sobre los retos que enfrentarán en el senado este año. Biden y sus aliados tienen grandes ambiciones para mejorar la infraestructura del país e incrementar el gasto federal para los trabajadores, estudiantes y familias de bajos ingresos. Pero los Demócratas tan sólo cuentan con una mayoría mínima, no los 60 votos requeridos para evadir trabas políticas por completo – forzándolos a considerar pactos incomodos para avanzar con su agenda.

La dinámica política ha llevado a varios Demócratas a preguntarse nuevamente si ya es tiempo de eliminar los mecanismos obstruccionistas; lo que en efecto les permitiría avanzar importantes proyectos legislativos en el Senado sin tener que trabajar con los republicanos o depender de maniobras legislativas arcaicas. Algunos Demócratas moderados no han querido que se de ese paso, sin embargo, y uno de los votos indecisos en el partido, el Sen. Joe Manchin, D-West Virginia, reiteró su fuerte rechazo a debilitar los mecanismos obstruccionistas en artículo de opinión publicado el fin de semana.

El estancamiento no le ha permitido a los Demócratas actuar con prontitud en una variedad de frentes políticos en las recientes semanas, desde avanzar legislación para cambiar las reglas de votación hasta establecer comisiones e investigaciones sobre el ataque del 6 de enero al Capitolio. El martes, sin embargo, la víctima fue el salario de las mujeres.

La Ley del Salario Justo buscar remediar el hecho de que las mujeres ganan el 84% de lo que ganan los hombres incluso haciendo los mismos trabajos y teniendo las mismas cualificaciones, de acuerdo con data recabada por el Pew Research Center. Murray y sus colegas Demócratas dijeron que la ley empoderaría a las mujeres para abrir casos por discriminación salarial en respuesta a cualquier injusticia de esa naturaleza.

“Debemos cerrar la brecha en los salarios de una vez por todas”, dijo la Rep. Rosa DeLauro, D-Connecticut, quien ha estado presentando y promoviendo el proyecto de ley en la Cámara desde 1993.  Ella dijo que la pandemia, la cual ha dejado a millones de mujeres desempleadas, ha incrementado aún más la disparidad.

Los legisladores de la Cámara adoptaron la medida en abril, con la oposición de prácticamente todos los republicanos. Los legisladores republicanos se unieron en su totalidad en el Senado este martes, negando a los Demócratas los 60 votos requeridos para tan siquiera empezar a debatir el proyecto de ley. Más temprano ese día, el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell, R-Kentucky, criticó la propuesta como “un regalo para los abogados demandantes de EE.UU.”. Él describió la votación durante su conferencia de prensa semanal como una estrategia de los Demócratas para convertir junio en “el mes del avance de todas las provisiones de extrema izquierda que procedan de la Cámara ”.

Barricadas políticas similares hicieron fracasar un intento previo de los Demócratas por atender otro asunto económico de importancia que afecta a los trabajadores – el salario mínimo federal, que no ha cambiado en muchísimo tiempo. El problema comenzó en la primavera, cuando Biden inicialmente buscó elevar la tarifa mínima a $15 por hora como parte de un paquete de estímulo de $1,9tn (millones de millones de dólares) para enfrentar el coronavirus. Los Demócratas de la Cámara aprobaron exitosamente la propuesta, conocida como el Plan de Rescate Estadounidense (American Rescue Plan), con su incremento del salario mínimo intacto. Pero la medida enfrentó inmediatamente obstáculos políticos y procesales en el Senado, donde promotores como el Sen. Bernie Sanders, I-Vermont, se consiguió con objeciones incluso dentro del partido Demócrata, con el cual hace equipo. Los legisladores terminaron por abandonar sus esfuerzos, prometiendo retomarlo más adelante este año. Desde entonces, Sanders y otros líderes Demócratas en el Senado se han unido a Schumer en negociaciones privadas para tratar de reconciliar las diferencias dentro del propio partido en cuanto a la propuesta del incremento salarial. Pero no han tenido éxito en conseguir un punto en común en cuanto al monto del incremento o las categorías de trabajadores que se beneficiarían de él.  Sanders no respondió a una solicitud de comentario.

Biden, entre tanto, ha tratado de tomar pasos limitados por sí solo: firmó una orden ejecutiva en abril que requiere a los contratistas federales pagar a sus trabajadores un salario mínimo de $15 por hora comenzando en el 2022. Esta política y otros asuntos de atención pública han llevado a muchos empleadores a anunciar sus propios incrementos salariales, mientras que algunas legislaturas estatales han incrementado los salarios mínimos por hora voluntariamente en virtud de la falta de acción en Washington.

Un oficial de la Casa Blanca, hablando bajo anonimato para describir lo que están pensando internamente, dijo que el presidente permanece comprometido a elevar el salario mínimo. El consejero también habló de otros programas implementados como parte del paquete de ayuda por el coronavirus de $1,9tn que ofrecen asistencia financiera a los trabajadores y a sus familias, incluyendo el desembolso de otro pago único como estímulo.

Pero los Demócratas en la Cámara y el Senado insisten en que no han terminado de poner presión en el tema y están buscando otros vehículos legislativos para avanzar el aumento del salario mínimo, preocupados de que no pueda aprobarse como medida independiente.  El Sen. Ron Wyden, D-Oregon, presidente del Comité de Finanzas, el cual tiene un enfoque principalmente impositivo, dijo que está tratando de sumar apoyo adicional al proponer rebajas a los impuestos de pequeñas empresas que puedan tener dificultad para pagar el incremento a sus empleados.

“Los Demócratas saben que éste es un asunto sumamente importante en términos de cumplir con las promesas electorales”, dijo Wyden. “Nos enfocamos en ello en el 2020 y aquellos de nosotros a quienes nos importa profundamente permaneceremos activos hasta que cumplamos nuestra promesa”.

Algunos congresistas liberales, mientras tanto, están estudiando otros vehículos legislativos – incluyendo el proyecto de ley anual del Pentágono, de autorización cuasi obligatoria – como una opción en los próximos meses.

“Los Demócratas ganaron la Presidencia, la Cámara y el Senado con un mandato claro de cambio para los trabajadores estadounidenses, incluyendo el aumento del salario mínimo a $15 por hora”, dijo Ilhan Omar, D-Minnesota, señalando que los caminos legislativos incluyen las medidas conocidas como la Ley de Autorización de Defensa Nacional y otros proyectos de ley que incluyen mejoras a la infraestructura.

“Fuimos electos para liderar”, dijo ella. “Debemos actuar en consecuencia”.

Información del Autor:

Tony Romm es reportero sobre política de tecnología en The Washington Post. Ha dedicado casi diez años a cubrir las formas como empresas tipo Apple, Facebook y Google navegan los pasillos de gobierno – y las regulaciones que algunas veces resultan de su cabildeo.

COMPARTE
últimas noticias


Sucesos

El caso de Hickman's Family Farms

MS-13: "Te unís o te morís"


Política

La representante Tricia Cotham deja el Partido Demócrata para unirse al Republicano


Nacional

En Florida preparan ley contra los periodistas y medios de comunicación