Un pastor de Tennessee encabezó el pasado miércoles por la noche una quema de libros de Harry Potter y Crepúsculo, que se organizó para “luchar contra las influencias demoníacas”.
El contexto: La quema, que se retransmitió en directo por Facebook, se produjo tras la decisión del mes pasado de un distrito escolar de Tennessee de prohibir la novela gráfica Maus, basada en el Holocausto.
- El evento de Locke en el suburbio de Nashville de Mt. Juliet atrajo a grandes multitudes, ya que los participantes arrojaron ejemplares de las series Harry Potter y Crepúsculo , entre otros libros.
- Según Tyler Salinas, un fotógrafo que estaba presente en la hoguera, había un contra manifestante, que sostenía ejemplares de Fahrenheit 451 y El origen de las especies. La persona arrojó al fuego un libro que, según él, era la Biblia.
- La Asociación Americana de Bibliotecas dijo que recientemente ha visto un aumento "sin precedentes" en las solicitudes de prohibición de libros: contó 330 libros que fueron cuestionados como objetables en el otoño de 2021, en comparación con 156 en todo el año 2020.
- El pastor Locke también estuvo presente en los disturbios del 6 de enero "rezando y predicando". Además está en contra del uso de los cubrebocas y las vacunas.
¿Qué dicen? "Somos muy conscientes de lo que estamos haciendo. Tráiganlo todo. Dejen de permitir que las influencias demoníacas entren en su casa", escribió el pastor y teórico de la conspiración pro-Trump, Greg Locke, en una publicación de Facebook que ya ha sido eliminada.
- "Estaremos en nuestra serie continua sobre la Liberación de los Demonios. Tenemos cosas que llegan de todas partes que quemaremos. No estamos jugando. La brujería y las cosas malditas deben desaparecer", escribió Locke.
- Antes de la quema, Locke dio un sermón diciendo que estaba luchando contra los "demonios masones libres".
- "Ya no me meto con las brujas, no me meto con la brujería... no me meto con los demonios... los echaré a todos en el nombre de Jesucristo", dijo Locke, mientras la multitud de asistentes vitoreaba y aplaudía en respuesta.
- "En mis veinte años en ALA, no puedo recordar un momento en el que tuviéramos múltiples desafíos que llegan a diario", sostuvo Deborah Caldwell-Stone, la directora de la Oficina de Libertad Intelectual de ALA.
Fuente principal de la noticia: The Guardian