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1.145 libros sobre raza y LGBT han sido prohibidos en las bibliotecas escolares de EE UU

Texas lideró el país con la mayor cantidad de prohibiciones de libros con 713, seguido de Pensilvania Florida, Oklahoma, Kansas y Tennessee

Las prohibiciones de la novela gráfica Gender Queer: A Memoir de Maia Kobabe alcanzan 30 distritos. Es el título que más ha sido restringido en Estados Unidos

Más de mil libros, sobre todo aquellos sobre raza, sexualidad y temas LGBT, han sido prohibidos en las aulas y bibliotecas escolares en los últimos nueve meses, cediendo a la presión de conservadores y padres, de acuerdo con un informe de la organización de escritores PEN America.

Prohibidos en EEUU. La organización documentó en el Índice de prohibiciones de libros escolares el aumento de censura de libros en los distritos escolares de todo el país, desapareciéndolos de las bibliotecas escolares y de los planes de estudios.

  • La base de datos que armó la organización enumera 1.586 prohibiciones de libros que ocurrieron en 86 distritos escolares en 26 estados entre el 1 de julio de 2021 y el 31 de marzo de este año.
  • Estas prohibiciones se traducen en 1.145 títulos de libros únicos de 874 autores diferentes, 198 ilustradores y 9 traductores.
  • Texas lideró el país con la mayor cantidad de prohibiciones con 713, seguido de Pensilvania (456), Florida (204), Oklahoma (43), Kansas (30), y Tennessee (16).  Estos seis estados tienen en común legislaturas con mayoría republicana.
  • Los 3 principales títulos prohibidos se centran en personas LGBTQ+ o tocan el tema de las relaciones entre personas del mismo sexo: Gender Queer: A Memoir de Maia Kobabe prohibido en 30 distritos, All Boys Aren't Blue de George M. Johnson, prohibido en 21 distritos, y Lawn Boy de Jonathan Evison, prohibida en 16 distritos.
  • La mayoría de los libros son obras de ficción, sin embargo, 28% son de no ficción e incluyen libros de historia, ensayos analíticos y/o personales, y obras de referencia e informativas para niños.
  • Sobre los títulos incluidos en la base de datos, detallan: 41% incluían protagonistas o personajes secundarios destacados que eran personas de color, 33% abordan explícitamente temas LGBTQ+ o tienen protagonistas o personajes secundarios destacados que son LGBTQ+, 22% abordan directamente temas de raza y racismo y 16% son libros de historia o biografías (9% de estos están relacionados con los derechos y el activismo).

Contexto. Bajo el lema y justificación de “Derechos de los padres en la educación”, activistas conservadores y políticos republicanos han impulsado las prohibiciones de libros, muchas veces tergiversando el término de “teoría crítica de la raza”, una teoría de corte universitario que no se enseña en escuelas públicas, pero que es usado para definir cualquier enseñanza sobre el racismo en Estados Unidos.

  • Padres conservadores también han ido a las juntas escolares en numerosos estados cuestionando el uso de libros que consideran sexualmente explícitos o que abordan el racismo.
  • Algunas legislaciones inclusive prohíben a los maestros discutir temas relacionados con la raza o el sexo en el aula, como la reciente promulgada en Florida, la HB 1157, conocida como “No digas gay”, que prohíbe las discusiones sobre orientación sexual e identidad de género en las escuelas.

“Testigos del borrado de temas inclusivos”. El autor principal del informe, Jonathan Friedman, también director del programa de educación y libertad de expresión de PEN America, dijo que el desafío que enfrentan los libros “no tiene paralelo en su frecuencia, intensidad y éxito”.

  • “Debido a las tácticas de los censores y la politización de los libros, vemos que se eliminan los mismos libros a través de las fronteras estatales: libros sobre raza, género, identidades LGBTQ+ y sexo con mayor frecuencia”, detalló.
  • Agregó: “Este es un ataque orquestado contra libros cuyos temas solo recientemente se afianzaron en los estantes de las bibliotecas escolares y en las aulas. Estamos siendo testigos del borrado de temas que solo recientemente representaron un progreso hacia la inclusión”.

Retroceso de la Primera Enmienda. La directora ejecutiva de PEN America ve el aumento de prohibiciones de libros en Estados Unidos como un retroceso de la Primera Enmienda, que establece que el Congreso no podrá hacer ninguna ley limitando la libertad de expresión, entre otras.

  • “Los padres y miembros de la comunidad merecen una voz en la configuración de lo que se enseña en nuestras escuelas; pero la adopción de prohibiciones de libros como un arma para protegerse de las narrativas que se consideran amenazantes representa un retroceso preocupante del compromiso histórico de Estados Unidos con los derechos de los estudiantes de la Primera Enmienda y de reaccionar al discurso considerado objetable con más discurso, en lugar de prohibiciones censuradoras”, dijo en un comunicado.

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