Millones de habitantes de Beijing suman dos pruebas para detectar nuevos casos de COVID-19, en una rápida respuesta local para evitar la propagación de la pandemia y vivir la dura realidad que atraviesa Shanghái y su conocido confinamiento.
Entretanto, el gobierno local busca que los supermercados se sigan abasteciendo y el desespero no se apodere de los habitantes del lugar.
¿Por qué es relevante?. Las autoridades de Beijing anunciaron 70 nuevas pruebas positivas de COVID-19 desde el viernes concentradas en ocho distritos. La mayoría de los casos se informaron en Chaoyang, donde habitan 3.4 millones de personas. A estos se les ordenó someterse a tres rondas de pruebas en solo una semana.
- Esto ha llevado a pensar que Beijing podría estar próximamente aplicando un confinamiento como el que atraviesa Shanghái.
- La situación no solo se mide en casos, también desde el plano económico, pues las exportaciones en Shanghái se vieron frenadas, afectando al mercado mundial.
Lo que dicen los números. Solo en el distrito de Chaoyang, las autoridades de Beijing aplicaron 3.5 millones de pruebas para detectar casos de coronavirus el miércoles 26 de abril. Esta es la segunda ronda en poco tiempo, pues ya pasaron por el proceso el lunes 24 del mismo mes.
- El martes, las pruebas aplicadas fueron 16 millones en otros distritos, donde este jueves se volvieron a hacer el mismo número.
- La gran mayoría de los habitantes de Beijing -20 de los 22 millones- recibirán tres pruebas esta semana.
Que lo digan ellos. “Estos últimos dos días, cada vez que voy al supermercado hay mucha gente, así que me doy la vuelta y me voy, ya que me siento un poco inseguro. Puedo entender el pánico, dado lo que pasó en Shanghái”, dijo a la agencia de noticias Reuters Shi Wei, de 53 años de edad.
Fuente principal de la noticia: Reuters